Galardonado el Camino por su divulgación del catolicismo

Josefa Rodríguez

Este miércoles tuvo lugar lugar la XXV edición de los Premios CEU Ángel Herrera, un acto presentado por Ángel Expósito y Marta Jaumandreu, en el que monseñor Julián Barrio, arzobispo de Santiago, y Luis Hernando de Larramendi, presidente de la Fundación Ignacio Larramendi, recogieron en nombre de todas las diócesis por las que atraviesa el Camino de Santiago y de la Fundación Ignacio Larramendi el Premio CEU Ángel Herrera en la categoría de Difusión de la Cultura Católica.

En su intervención, monseñor Barrio destacó que Europa nació peregrinando en torno a la memoria del apóstol Santiago y que el Camino de Santiago es un Camino de religiosidad, espiritualidad, cultura, arte y, por supuesto, un Camino que nos tiene que ayudar a recuperar la antropología.

Afirmó también que recuperar lo que son los valores del Camino de Santiago, nos ayudará a configurar esta nueva Europa y añadió que el Camino de Santiago es una oportunidad que uno tiene para encontrarse consigo mismo, con los demás y con Dios.

Los Premios CEU Ángel Herrera se crearon en 1997 con la intención de reconocer la labor social, docente e investigadora de personas o grupos pertenecientes a los diferentes centros del CEU.

Estos galardones se conceden anualmente y toman el nombre del fundador de la Asociación Católica de Propagandistas (ACdP) y de la Fundación, el prelado Ángel Herrera.

En las últimas ediciones, se han incorporado nuevas categorías con las que se pretende potenciar y destacar la labor de personas, instituciones y empresas que han destacado por su contribución a la mejora de la sociedad y la promoción del bien común.

Oración. Con motivo de la Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos, celebrada desde el día 18 hasta el 25 de enero, el arzobispo afirmó que “necesitamos hacernos peregrinos también los cristianos que estamos entorno a la meta y al Camino, para despojarnos de nuestras seguridades y escuchar de nuevo la voz del Señor que nos invita a salir, aunque sea a lo desconocido”.

“La Iglesia Católica se hace peregrina con las demás Iglesias y comunidades eclesiales para que se haga efectiva la unidad de todos los cristianos. El cuerpo de Cristo no puede estar dividido. Por eso el ecumenismo es un deber sagrado para nosotros”, señaló monseñor Barrio.

Destaca también que la Iglesia que peregrina en Santiago “ofrece un espacio y un tiempo de reconciliación con Dios en el Jubileo, en un Año Santo”.