La ampliación del Clínico supondrá la pérdida de más plazas de parquin

En el pleno de septiembre se declarará de Interés Especial el proyecto de nuevos edificios para el hospital, que crecerá 30.000 metros cuadrados // Urgen más espacio en el caótico aparcamiento
Hospital Clínico Universitario de Santiago
Luis Álvarez
La falta de aparcamiento en el hospital Clínico provoca que algunos usuarios estacionen en las aceras. Foto: Fernando Blanco

En el pleno municipal del mes de septiembre está previsto declarar el proyecto de ampliación del hospital Clínico de A Choupana, que ya tiene diseñado la Xunta, como de Interés General para acelerar los trámites urbanísticos y que se pueda desarrollar cuanto antes.

La ampliación es muy necesaria y beneficiosa para el complejo y sus usuarios, pero el problema es que redundará en una importante carencia que arrastra el recinto hospitalario prácticamente desde su construcción, la falta de aparcamientos.

Los nuevos edificios y equipamientos que se fueron construyendo en los últimos años eliminaron muchas de las escasas plazas con las que contaba, y la construcción del aparcamiento subterráneo no acabó de solucionar el problema. El hecho de que la demanda del mismo quede prácticamente restringida a las horas de consultas externas hizo que la concesión se hiciera con unas tarifas altas para compensar la inversión realizada en su construcción.

Así las cosas, desde hace años se habla de la posibilidad de construir una nueva zona de aparcamiento que permita solucionar el acceso en vehículo privado, muy necesario para todos aquellos que acuden con un paciente de edad o con problemas de movilidad, y que no pueden recurrir al transporte público.

Cuando se planteó el proyecto de trasladar la Facultad de Medicina del casco histórico a los terrenos que hoy ocupa el hospital Gil Casares, se barajaron varias opciones de instalaciones subterráneas, tanto en el propio recinto como en las inmediaciones, pero al final fueron descartadas.

La última propuesta fue habilitar un aparcamiento en superficie situado en los terrenos del Campus Vida, junto a la carretera de Noia, que además de a los usuarios del Clínico, también pudiera servir como aparcamiento de borde para los visitantes de la ciudad, sobre todo para el verano, cuando la presión hospitalaria es menor.

Sin embargo, este proyecto tampoco parece que vaya a desarrollarse a medio plazo, en parte, porque todavía está sin cerrar el diseño del Campus Vida, cuya rehabilitación de viales todavía está en trámites entre el Ayuntamiento y la Universidade.

La cuestión es que con la previsión de ampliación del hospital, que ocupará en torno a los 30.000 metros cuadrados, un treinta por ciento más de lo que tiene en la actualidad, se perderá otro importante número de plazas, hasta el punto de que Raxoi no descarta cambiar la normativa actual que establece la obligatoriedad de disponer de dos plazas de aparcamiento por cada cien metros construidos a tan solo una, con el fin de que la operación pueda acabar de encajar, porque la intención municipal es priorizar la ampliación de las instalaciones y eliminar cualquier obstáculo posible.

Lo que el Ayuntamiento dejó claro es que no está en condiciones de afrontar el coste de la construcción de un aparcamiento subterráneo por su cuenta, y que solo cabría la posibilidad de adaptar temporalmente alguno de los suelos del entorno.

Esto ultimo chocaría con el problema de que toda la zona, tanto los polígonos residenciales como el Campus Vida, están en pleno desarrollo y escasean las opciones de encontrar uno libre que sirva para un recinto de este tipo.

Los problemas de estacionamiento en la zona en las horas en las que funcionan las consultas externas son una pesadilla para los usuarios e incluso para el propio personal del centro, y no se limitan al complejo, sino que afectan también a todos los barrios del entorno durante las mañanas.