Las obras en el ‘caótico’ nudo de Concheiros finalizarán en agosto

Un espacio arbolado de 6.000 m2 sustituirá la actual rotonda // Habrá preferencia peatonal, se mantienen los cuatro carriles y estará regulado por semáforos
Martin Fernández
LAS OBRAS en la zona de la avenida de Lugo encaran ya la recta final. Foto: Fernando Blanco

La nueva plaza verde de 6.000 metros cuadrados que transformará el cruce de Os Concheiros, y permitirá compaginar el tránsito ordenado y prioritario de los peregrinos que se acercan a Santiago por el Camino Francés con un tráfico fluido y seguro para los vecinos de esa zona, estará lista a lo largo del mes de agosto, tras una inversión de la Xunta de cerca de 3 millones de euros.

Así lo confirmaron ayer desde la Consellería de Infraestruturas e Mobilidade, coincidiendo con el desarrollo de la fase final de las obras de mejora e integración paisajística que están en plena ejecución en este ámbito del itinerario Francés, entre la avenida de Lugo y el cruce de Os Concheiros. El anuncio coincide, además, con los trabajos que se están realizando desde ayer en el carril ascendente, lo cual implica que se desvíe de nuevo la circulación a la altura de la Cruz Roja por las rúas de Londres y de Lisboa. Este corte afecta a las líneas 9, 13, C2, C5 y C11 y a la parada 128, rúa Berlín (centro sociocultural), del transporte urbano. “Na web de Tussa (www.tussa.org) poden consultarse as paradas suprimidas e alternativas, así como os itinerarios de desvío por liña”, indican desde Raxoi.

La remodelación de la avenida de Lugo es quizás la más “singular” de las previstas en las distintas entradas de la Ruta Jacobea en la capital gallega, subrayan desde la Xunta, que ejecuta las obras.

El objetivo de esta intervención es hacer del nudo de Concheiros una zona en la que el Camino de Santiago sea más identificable para el peregrino, buscando darle la continuidad que se vio truncada cuando se ejecutó la avenida de Lugo a modo de ronda urbana; además de reforzar la seguridad y mejorar los tráficos, pensando en la calidad de vida y en el día a día de los vecinos de esta zona de la ciudad.

Asimismo, para dar una mayor continuidad al Camino y hacerlo más fácilmente reconocible por los peregrinos, se va a construir un gran espacio “verde y más humano”, prolongando la fila de árboles de la avenida de Lugo hacia arriba, hacia el cruce de Os Concheiros. Además, se colocará iluminación específica: una tira de luminarias colgantes en la zona del nudo que servirá de guía a los caminantes en su recorrido hacia el Obradoiro. En cuanto al refuerzo de la seguridad vial y para favorecer los tráficos urbanos, facilitando la vida de los vecinos, en la zona del cruce se colocarán planchas de aglomerado para inducir a la reducción de la velocidad, fomentando un mayor respeto entre conductor y caminantes en la avenida de Lugo, que mantendrá los dos carriles de bajada y subida.

De hecho, en los últimos días ya se observa con claridad la nueva zona de preferencia peatonal que delimitará este espacio. La idea de la Xunta es que el tráfico sea “más fluido”, pero también a menor velocidad, debido al estrechamiento de los carriles a uno y otro lado de la nueva plaza.

GLORIETAS. En este sentido, se colocarán distintos pavimentos y una “zona larga de cruce” regulada por semáforos para los peatones, que permitirá que los peregrinos no tengan que zigzaguear, como hasta ahora, para proseguir su recorrido.

El proyecto incluye, además, dos nuevas glorietas: en el cruce con la rúa Londres para facilitar la movilidad hacia equipamientos como el Centro de Salud y la Cruz Roja; y otra más arriba, en el cruce de la estación de autobuses y el conservatorio de música. De esta forma, la caótica rotonda del cruce de Os Concheiros desaparecerá.