Lista al fin para adjudicar la ‘isleta’ que quedó pendiente en Concheiros

Fue la zona en donde aparecieron viviendas ilegales y un depósito de gas que no estaba registrado
R.S.
El lugar que no se pudo reurbanizar en Concheiros, en la zona par de la rúa, será reforzado ahora con las obras

La eterna rehabilitación de Concheiros dará en los próximos días un gran paso adelante hacia su conclusión, con la adjudicación de las obras para reconstruir la zona que quedó pendiente a la altura del Bar Rey. El lado par de la calle, en esta zona, será reforzado adaptándolo al resto de la calzada, donde ya han finalizado las intervenciones.

Las obras en este espacio habían sido paralizadas tras hallarse bajo el mismo varias viviendas supuestamente ilegales, a las que hubo que sumar un depósito de gas con el que tampoco se contaba en la planificación inicial. Tras echar el freno de mano dada la situación, se entró en un largo proceso burocrático y se dejaron a un lado los trabajos afectados, que recaerán ahora sobre otra empresa cuyo nombre se espera conocer en los próximos días, tras la adjudicación.

En su día, el concejal de Obras, Javier Fernández, señaló que la situación de las construcciones entre los números 16 y 22 tuvo que cambiarse porque en el proyecto original lo que estaba previsto era simplemente sustituir el pavimento actual por uno de adoquín. Pero los estudios estructurales realizados por la dirección facultativa sobre la resistencia de los mismos, así como la presencia de viviendas ilegales, que requirieron otro estudio desde Disciplina Urbanística, hicieron que se decidiese sacar estas viviendas del ámbito de actuación, procediendo a realizar nuevos estudios.

Javier Fernández también se refirió, por entonces, a la situación del aparcamiento de Triacastela, donde se encontró inesperadamente un depósito de gas, y rechazó que sea el mismo que se descubrió cuando se llevaron a cabo las obras del ascensor. En aquel momento, explicó, “se aclaró con el departamento de expropiaciones que era una instalación en parcela municipal expropiada y que procedía demolerla, y así se hizo”.

Ahora los trabajos incluirán el refuerzo del firme antes de proceder a la reurbanización, que tendrá un carácter diferenciado del resto de las zonas adyacentes. Queda pendiente también la colocación de bancos en el margen impar de la calle, así como papeleras y jardineras. Estos elementos impedirán, al menos en parte, el aparcamiento indiscriminado que se produce en la rúa en muchos momentos del día. Falta también tomar medidas para evitar el continuo exceso de velocidad, limitada -solo teóricamente- a veinte por hora, con una prioridad peatonal que no se respeta.