... Cuando un cliente se olvidó de su mascota en el Hotel México: una pitón de más de tres metros

Normalmente, cuando la gente se hospeda en un hotel suele salir de la habitación con más pertenencias que las que ha llevado para disfrutar las vacaciones. Jabones, sobres de colonia y cepillos de dientes suelen ser los productos habituales que acaban en las casas de los clientes. Sin embargo, existen veces en las que son los usuarios los que se olvidan de alguna que otra cosa, pero seguro que ninguna como lo que ocurrió hace treinta años en el hotel México. Corría el año 1994 cuando un hombre se hospedó durante ocho días en una habitación del céntrico alojamiento. A pesar de ir acompañado de una pitón de más de tres metros, decidió reservar un dormitorio individual. El dueño de la enorme serpiente pasó allí poco más de una semana, pero su “mascota” logró disfrutar un poco más de tiempo de la ciudad compostelana, hasta que el servicio de limpieza entró en la habitación y, tras llevarse un buen susto, buscó la forma de deshacerse del animal. Finalmente, Manolo Martínez, del centro sociocultural del barrio de Vite, se hizo cargo de la pitón.