Fueron años de grandes cambios en la Universidade de Santiago, que se hicieron notar también en el casco histórico, donde además de los edificios antes citados, “también se recuperó la Casa da Concha, como sede del Consello Social”, destaca, y se apostó por el Campus Norte, con la creación de la Facultade de Filoloxía. En el sur, en el Campus Vida, la puesta en marcha de las nuevas facultades “supuso también la urbanización de toda la zona, donde se construyeron también edificios como el que hoy ocupa la residencia Monte da Condesa”, destaca el entonces rector Carlos Pajares. “En cinco años se vivió un proceso de desarrollo muy importante”, que se tradujo en la construcción de nuevos edificios y la recuperación de algunos inmuebles de gran valor histórico.