Tercer cierre desde comienzo de año: precintan Vanitas por incumplimientos

La discoteca del Ensanche fue clausurada por no acometer las reformas solicitadas por Raxoi // Su cierre se une al de Cacao, en dos ocasiones, así como del local de ocio nocturno The Way Club
Movida nocturna
Brais Fernández
Cacao cerrado esta semana por el Concello. Foto: A. Hernández

No hay dos sin tres, dice el refrán. Tras los cierres de Cacao y The Way Club, ayer le tocó el turno a Vanitas. En todos ellos, un denominador común: los incumplimientos en materia urbanística. La discoteca del Ensanche, presente durante los últimos días en los medios de comunicación por producirse en sus puertas la segunda reyerta del año con heridas de arma blanca en Santiago, se ve obligado a parar su actividad, con carácter inmediato, tras el expediente que acaba de abrir el Concello contra el negocio.

En este sentido, la concejal de Urbanismo, Mercedes Rosón, en conversación con EL CORREO GALLEGO ha declarado que se trata de una situación muy similar a la del negocio de ocio nocturno de la Rúa Nova. De este modo, en ambos casos, los propietarios contaban con un apercibimiento por parte del departamento municipal, señalando la necesidad de realizar ciertos cambios para garantizar la seguridad de los clientes y, además, cumplir con lo que marca la normativa.

Sin embargo, en base a lo vivido, ninguno de los responsables acometió dichas reformas, lo que obligó a su precinto. En este caso, apuntan, la situación se deriva de las problemáticas para la evacuación de las personas que se encuentran en el interior, a través de las salidas de emergencia que deben poseer, un motivo que ya generó, en su día, muchos quebraderos de cabeza a los anteriores dueños, cuando en el establecimiento, muy conocido en la ciudad, todavía lucía el cartel de Apolo.

Asimismo, como sucede en otros pubs de la capital gallega, también hay pendientes denuncias por los ruidos generados por estos locales, ya no sólo durante su actividad, sino también a la hora de dispersarse los fiesteros, que se suelen acumular en la zona de entrada y salida.

Cabe destacar que los informes de los técnicos municipales, descubriendo que no se habían llevado a cabo los cambios pertinentes han llegado en un momento en el que las discotecas se encuentran más vigiladas que nunca. Así, durante los fines de semana, se aumentaron los controles policiales para evitar posibles trifulcas, como las que tuvieron lugar a comienzos de año.

A mayores, durante el pasado miércoles, el parte de la Policía Local de Santiago señalaba que los agentes habían visitado cinco establecimientos de fiesta, todos ellos, aparentemente, sin problema alguno.

Esta parada obligatoria del negocio se produce cuatro meses después de su reapertura, con nuevo nombre. Así, desde el 15 de septiembre, llevaba funcionando a pleno rendimiento, siendo uno de los lugares preferidos por los jóvenes para pasar las noches de fiesta.

clausurados TRAS SEMANAS FUNCIONANDO. El caso de Vanitas resulta similar al que han vivido, a finales de 2022 y comienzos de 2023, la cervecería circular Cacao, así como la discoteca de la zona vieja, The Way Club, puesto que la decisión de Raxoi se produjo tras estar en funcionamiento varias semanas o meses.

En todos ellos, los propietarios han aprovechado las dilaciones propias de los expedientes sancionares, así como de los plazos para subsanar errores, logrando abrir sus locales en este tiempo. Sin embargo, ante la inacción, la decisión del Concello termina siendo el cierre obligatorio, así como la consiguiente multa.

Por último, desde Urbanismo señalan que las medidas no resultan más restrictivas, ni mucho menos, sino que se trata de cumplir con una normativa muy clara, pero que no todos lo hacen, llegando a estas situaciones límite, con medidas extraordinarias.