El Prado y el Buen Retiro, declarados Patrimonio Mundial

La inscripción del Paisaje de la Luz en la lista se aplazó de 2020 a este mes por la pandemia
Termalismo
María Hermida

El Paseo del Prado, el Jardín de Buen Retiro y el conjunto arquitectónico, artístico y natural madrileño que lo rodea pasaron ayer a engrosar la Lista de Patrimonio Mundial de la Unesco.

La institución decidió la inclusión de la candidatura promovida bajo el nombre de Paisaje de la Luz durante la cuadragésimo cuarta sesión del Comité del Patrimonio Mundial, que si bien tiene su sede en la ciudad suroriental china de Fuzhou, se celebra en su mayoría de manera virtual.

La candidatura madrileña estuvo en el limbo unos momentos debido primero a las dudas al respecto presentadas por el informe técnico del Consejo Internacional de Monumentos y Sitios (Icomos) y después por la intención del presidente de la sesión de posponer la decisión sobre la inclusión hasta este lunes y dar por concluida la jornada.

Puesto que se había llegado a la fase final de revisión de la candidatura y solo restaba modificar algunos puntos para la inclusión del Paisaje de la Luz, varios países, como Omán y Etiopía, propusieron a la presidencia que se terminara con el proceso.

Así pues, los delegados zanjaron en unos minutos los flecos restantes para la entrada en la Lista de Patrimonio Mundial del espacio urba-
no, artístico y natural madrileño, al que reconocieron su valor universal excepcional.

Con esta inclusión, España pasa a tener 49 bienes inscritos en la Lista de Patrimonio Mundial de la Unesco, de los cuales cinco están en la comunidad de Madrid: el Hayedo de Montejo, el monasterio de El Escorial, la ciudad de Alcalá de Henares, el paisaje cultural de Aranjuez y el añadido este pasado domingo

Además, según la Comunidad de Madrid, el Paseo del Prado “es el primero de los paseos arbolados urbanos europeos”, y en su eje se encuentran varios importantes edificios históricos, como el Palacio de Cibeles o el Banco de España, además de la concentración de museos como el del Prado, el Reina Sofía o el Thyssen-Bornemisza.

“Este ámbito constituye un paisaje urbano extraordinario donde se han unido cultura y naturaleza desde mediados del siglo XVI hasta hoy, lo que le confiere el rango de valor universal excepcional”, aseguraron en la página web de la propia candidatura, presentada en 2019.

La Comunidad de Madrid destaca también que no se trata de un mero decorado urbano, sino de un espacio integrado en la vida diaria de los madrileños, como atestiguan las manifestaciones por la democracia y contra el terrorismo que recorrieron esos espacios, la Feria del Libro, en el Retiro, o las celebraciones de los dos clubes de fútbol más laureados de la capital española: el Real Madrid y el Atlético de Madrid.

Todas las candidaturas revisadas y aprobadas hasta ahora son relativas a 2020, cuando la Unesco se vio forzada a cancelar su cita anual por las condiciones sanitarias mundiales derivadas de la pandemia de coronavirus.

En la sesión de ayer también se inlcuyeron a la lista el templo indio de Kakatiya, el ferrocarril trans-iraní y la ciudad portuaria china Quanzhou.

Hoy de hecho, está previsto que se revisen las restantes relativas a 2020, entre las que se encuentran el brasileño Sitio Roberto Burle Marx, el centro ceremonial y el observatorio solar de Chankillo, en Perú, aunque el retraso en el proceso de revisión podría posponerlas un día más.

Los sitios de la cultura que son correspondientes a 2021, tendrán que aguardar al menos hasta el martes para conocer si son finalmente incluidos en la Lista de Patrimonio Mundial.