Una de cada diez mujeres jóvenes sufrió violencia sexual a lo largo de 2020

En pandemia las agresiones con penetración afectaron al 64,4 % de las personas expuestas // Más ataques a féminas bisexuales
Violencia sexual
Irene Jiménez
Belén Sanz-Barbero, perteneciente al ISCIII, y Carmen Vives-Cases, de la Universidad de Alicante. Foto: Ciber

El 8,5% de los jóvenes (hombres y mujeres) en España afirma haber sufrido violencia sexual en los últimos 12 meses. Un 10,5 % de las mujeres de entre 18 y 35 años afirma haber sido víctima de uno de estos episodios a lo largo de 2020, un porcentaje que asciende al 13,3 % en el caso de las mujeres extranjeras y hasta el 17,5 % en las bisexuales, según el análisis realizado por investigadoras del CIBER de Epidemiología y Salud Pública.

Esta investigación, que analiza la victimización por violencia sexual en mujeres y hombres, con datos a finales de 2020, recoge los testimonios de 2.515 hombres y mujeres de entre 18 y 35 años y mide la violencia sexual con la misma escala que utiliza la Macroencuesta de Violencia contra la Mujer.

Esta escala incluye la exposición a una serie de comportamientos que abarcan desde tocamientos de carácter sexual no deseados al intento de mantener relaciones sexuales sin desearlo.

Un 6,8 % son hombres. Así, según estos parámetros, el 8,5 % de las personas entrevistadas declararon haber estado expuestas al menos a un comportamiento de violencia sexual durante 2020, aunque la prevalencia es mucho mayor en las mujeres (10,5 %) que en los hombres (6,8 %).

No obstante, las cifras más altas de violencia sexual se observaron en las mujeres bisexuales (17,5 %), en hombres homosexuales (14,2 %) y en mujeres nacidas en el extranjero (13,3 %).

Durante los meses del confinamiento por la pandemia, la prevalencia descendió hasta el 1,9 %, pero las relaciones sexuales con penetración no deseadas aumentaron, y afectaron al 64,4 % de las personas expuestas a violencia sexual durante este periodo.

Las responsables del estudio, que fue publicado en BMJOpen, Belén Sanz-Barbero (ISCIII) y Carmen Vives-Cases (Universidad de Alicante), consideran que la prevalencia es preocupante, y creen que, si bien las medidas de encierro como medida de contención de la pandemia disminuyeron las agresiones sexuales fuera de la convivencia, la exposición a relaciones no deseadas aumentó, sobre todo en mujeres nacidas fuera de España y en las personas no heterosexuales.

Según explica Carmen Vives, “las personas con atracción homosexual o bisexual fueron más propensas a experimentar violencia sexual en todos los periodos estudiados, es decir, antes, durante y después del confinamiento”.

Este estudio del CIBEResp forma parte de un proyecto más amplio sobre la violencia sexual y el uso de pornografía en jóvenes en España, ante lo que las investigadoras reclaman “el desarrollo de estrategias más efectivas para la prevención de la violencia sexual en la población joven, que requiere considerar las desigualdades sociales en base al sexo, orientación sexual y país de nacimiento que se observaron en este estudio”.