SECCIÓN. Más de cinco mil artistas se presentaron al concurso del Museo del Grabado de Ribeira en sus doce años de historia // Esta vez se recibieron más de doscientas obras de diecinueve países

Atlante: el árbol de ramificación mundial que brotó en aldea

Arte
Suso Souto
Manuel Lareo.

Hace doce años germinaba en el Museo del Grabado de Ribeira un concurso dedicado a esta disciplina artística que recibió el nombre de Atlante. Aquel ejemplar creció en la humildad de una pequeña aldea (Artes) gracias a la implicación de su mentor (Javier Expósito, dueño del museo), mecenas, administraciones públicas y empresas. Hoy, sus ramas abarcan un ámbito internacional. En estos doce años, más de 5.000 artistas de todo el mundo presentaron obras a este prestigioso certamen.

El museo acogió este sábado la entrega de premios de la duodécima edición, que recibió 215 obras procedentes de 19 países: Argentina, Brasil, Bulgaria, Canadá, Cuba, España, Francia, Gran Bretaña, Gibraltar, India, Irlanda, Israel, Italia, Uruguai, México, Pakistán, Polonia, Rumanía y Rusia. Los premios que se conceden suman la cuantía de 14.500 €.

El galardón Ramiro Carregal Rey (5.000 €) fue para Nuria Pena, de A Coruña, que finalizó los estudios de doctorado por la Universidad Complutense de Madrid con un tema de investigación sobre las ediciones ilustradas de El Quijote.

El premio Galicia-Pedras de Santiago (2.000 €), fue para Manuel Lareo, de A Coruña, que ganó la primera Bienal de Caricatura Gallega.

En cuanto a los tres premios Atlante (2.500 € cada uno), los vencedores fueron Rajel Bronfman (argentina afincada en Israel, especializada en técnicas de grabado e impresión); Tomasz Winiarski, de Polonia (quien ya atesora otros premios Atlante, de 2.500 € en 2013, de 5.000 € en 2014 y de 2.500 € en 2015, y que logró reconocimientos en Rusia, Canadá, Rumanía, Polonia, España y Armenia); y Deborah Chapman, de Canadá (quien recibe un Atlante por segunda vez, pues ganó uno de 2.500 € en 2013, y cuyas obras fueron premiadas o recibieron mención especial en Brasil, Argentina, España, Rusia, Bulgaria, Polonia, Ucrania y Hungría).

Se concedieron menciones de honor a Mirta Gendin, de Argentina (obras de su autoría se exhiben en el Museo de Buenos Aires o en la Biblioteca Nacional de New York); Vinicius Libardoni (arquitecto y artista italobrasileño); Paco Casal (artista ferrolano afincado en Aguiño, que empezó a pintar en 1985 estudiando la obra de Vázquez Doce); y María Meijide, nacida en Santiago, especializada en pintura figurativa de gran formato y cuadernos de viajes.