Confirma la SD el ilusionante fichaje del “picheleiro” Juampa

Incorporación de peso: jugador de calidad, polivalente, de la casa y, pese a su juventud, experto en Segunda B // Regresa a Galicia tras su paso por el Ebro
Fútbol
Antonio Pais
Técnico. Juampa Barros golpea el balón con su zurda, en un entrenamiento el pasado curso con el Ebro. Foto: ECG

No tardó esta vez mucho tiempo en llegar el anuncio de otro importante integrante del Compostela 2020-21, el ilusionante Compos que regresa a la Segunda División B. El fútbol tiene sus reglas, sus tiempos, y si en el inicio de la semana se demoró un poco más de lo previsto el cierre de la negociación para la continuidad del técnico Yago Iglesias, ayer la SD Compostela confirmó que estaba cerrado y bien cerrado el fichaje por una temporada de Juampa Barros. En ambos casos un dato común, en todo caso: no fue una coincidencia para los lectores de EL CORREO GALLEGO, que los fue informando puntualmente.

La nota de la SD Compostela anunciando ayer el fichaje de Juampa Barros desprendía alegría: como si se notase en la misma nota la satisfacción por una incorporación que ha costado, por la que ha habido que negociar duro (nota alta una vez más para Manuel Castiñeiras) pero que puede aportar mucho al nuevo proyecto de la SD: ilusionante proyecto, ilusionante fichaje, sin duda.

Porque Juampa, sólo 26 años pero calidad contrastada durante sus seis temporadas en la categoría de bronce del fútbol español, en el noroeste de España y en el este, era una incorporación codiciada por otros equipos.

Quería el CD Ebro que el chico siguiera siendo feliz en Zaragoza, donde la pasada temporada rindió a satisfacción (22 partidos había jugado en marzo, cuando llegó el maldito coronavirus a decir basta) y pujó con fuerza. Como el Guijuelo, que intentó también con insistencia que acabse en tierras extremeñas.

Pero Juampa se decantó por la oferta del Compos. Como destacó ayer la SD en su comunicado, Juampa es un “pichleiro de adopción”. Nacido en Buenos Aires pero desde niño en Galicia, en Aldea Nova (Bertamiráns), entre los once y los 20 años en la cantera del Deportivo (allí conoció a Bicho); después en el Órdenes, en el Racing de Ferrol (debut en Segunda B, allí coincidió con Brais Abelenda), en el CD Boiro (junto a Pato Guillén, Jimmy, David Soto) y en el Coruxo (pieza básica dos años)... Juampa quería volver a Compostela.

La oferta del Compos de Segunda B era de lo más atractiva para Juampa, que hasta la fecha no jugó en el Compos pero siempre llevó al Compos en el corazón.

Y el Compos buscaba un jugador de su perfil: zurdo, de banda, con calidad, con desborde, polivalente (puede jugar de extremo izquierdo o derecho, y si es necesario también de lateral en la zurda). Todo encajaba.

GALLEGO. Aunque lo que más se adecuaba al elogiable proyecto del Compos, además de sus cualidades técnicas y humanas (en ambas saca nota alta) es que Juampa responde plenamente a la filosofía de un proyecto, el de la SD, que gana cada vez más adeptos en el fútbol gallego: la apuesta, tantas veces echada en falta) por el producto de la casa. Los jóvenes. o no tan jóvenes, futbolistas con proyección gallegos, con calidad e ilusión por crecer en el fútbol, saben que tienen abiertas las puertas del Compostela. Y eso es muy importante, mucho más de lo que pueda parecer.

Junto a ello, otro atractivo: la filosofía de trabajo y el modelo futbolístico que defiende desde hace cuatro años con fuerza el cuerpo técnico encabezado por Yago Iglesias. Ahora atrae venir a jugar al Compostela.

Ese modelo, esa apuesta, merecen tener éxito. Como sucedió hace unos días en Balaídos, como debe repetir en Segunda B el Compos que ya tiene a Juampa, el feliz pichleleiro de regreso.