Serrat
y Philip Scrubb

IMPRESIONANTE, así ha sido el nivel de Philip Scrubb, el Superman de las viñetas del Obradoiro en el curso 2021-2022. No se puede hacer más en menos. En sus 12 partidos con el Obra, el equipo ganó cinco veces y perdió otras tantas por cuatro puntos o menos. Cuando fue fichado en marzo, el entorno obradoirista tanteaba la posibilidad de traer además a un pívot a causa del bajo rendimiento de Ellenson, quien, eso sí, ayudó a abrazar triunfos hasta el bajón de la segunda vuelta, doloroso dada la expectativa como el mejor pagado de la plantilla. Philip, escolta, vino gracias a su hermano Thomas Scrubb, el mayor (alero de 30 años respecto a 29), una silente navaja suiza, como indican sus 12 puntos y 5,1 rebotes en 28 minutos de promedio pero el pequeño, aunque llegó más tarde a Santiago... supo lucir capa de superhéroe (¡y el dorsal 23!) para firmar una media de 10,4 puntos en 20 min. al día, con un buen 41,3 % de acierto en los triples (frente al 34,3 % del equipo, el sexto peor de la ACB).

Curioso, el Obra, con fama de mejorar gigantes, ha tenido por héroe a uno de esos locos bajitos, que dice Serrat, quien, por cierto, canta el 8 de julio en A Coruña, y bien haría Mateo en regalarle a Philip la entrada, por lo que pueda venir.