A partir del lunes solo se hará seguimiento de los contactos estrechos de infectados de riesgo

Se priorizará el autocuidado // Tampoco será necesario que los allegados de casos positivos realicen una prueba de autodiagnóstico
Pandemia
Ángela Precedo
ifevi. Un hombre se realiza un test de antígenos durante un cribado. Foto: Marta Vázquez / E.P.

Dos años desde que la pandemia puso un pie en Galicia y parece que ya todo ha vuelto a la normalidad, con la salvedad de ciertas medidas aún vigentes, como el uso de la mascarilla. Infectarse hoy por hoy de covid, estando vacunado, no es lo mismo que en el pasado, y la mayor parte de la población o bien lo pasa de forma asintomática o desarrolla síntomas leves.

Así las cosas, era necesario avanzar, seguir dando pasos hacia una nueva estrategia de seguimiento y control del coronavirus, que pase únicamente por “proteger a la población más vulnerable”, reduciendo “las medidas llevadas a cabo sobre la población general”, tal y como explicó este viernes la directora xeral de Saúde Pública, Carmen Durán Parrondo.

Por ello, y después del acuerdo adoptado por la Comisión de Salud Pública sobre la eliminación de las cuarentenas a todos los contactos estrechos de positivos, independientemente de si están o no vacunados, quiso puntualizar varios términos dentro de la nueva estrategia que Galicia seguirá desde el lunes.

En este sentido, la doctora Durán explicó que “la dinámica de llamar a todos los positivos para preguntar cuáles son sus contactos estrechos ya no se seguirá de manera general en la población”. Eso sí, “se seguirá haciendo en determinados ámbitos vulnerables”, lo que abarca, según precisó, centros sanitarios –fundamentalmente hospitales y centros de diálisis–, centros sociosanitarios –residencias de ancianos, de discapacidad y centros de día– y centros penitenciarios.

De este modo, a un positivo que se le llame desde la central de seguimiento de contactos (en la que seguirán trabajando los médicos jubilados incorporados con motivo de la sexta ola), ya no se le realizará la encuesta de caso, porque “no se va a cuarentenar a la población general”.

Asimismo, además de centrar los esfuerzos sobre la población de los ámbitos más vulnerables, también se centrará sobre los trabajadores de los mismos, los cuáles también seguirán siendo preguntados por sus contactos estrechos en caso de ser positivos. Especialmente si tienen relación directa con los pacientes. Aquí se incluye también a los trabajadores y trabajadoras de los servicios de ayuda en el hogar, porque no solo trabajan con una persona vulnerable, sino que van rotando.

QUE LA PROPIA POBLACIÓN AVISE A SU ENTORNO Y TRASLADE RECOMENDACIONES. En este nuevo escenario, según indicaron tanto la doctora Durán como el conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, este viernes, lo que se hará será ir “hacia el autocuidado”, es decir, “que sea la población general la que si se infecta avise a sus contactos estrechos (aquellas personas con las que hayan estado durante más de quince minutos a menos de dos metros de distancia y sin mascarilla) para que extremen las medidas de prevención”, que siguen siendo las mismas que ya se conocían hasta ahora: mascarilla, distancia de seguridad, evitar el contacto con personas vulnerables, evitar ir a ámbitos vulnerables, reducir interacciones sociales y no ir a grandes eventos.

DESARROLLO DE SÍNTOMAS. Otro cambio importante es que ya “no se va a solicitar ninguna prueba diagnóstica” a estos contactos, excepto en ámbitos y grupos vulnerables. Ahora bien, en caso de que la persona desarrolle síntomas, pasaría a ser caso sospechoso, y debería quedarse en domicilio, aislada y llame al 881 54 00 45 para pedir una prueba que confirme si tiene la infección.