Cae a la mitad la contaminación del aire en las ciudades gallegas

El descenso del tráfico en la cuarentena es el principal motivo, indica Adega // La única excepción es Ferrol, donde casi no se notó // La mayor bajada fue en Vigo
Salomé Barba
Ciudad Departamental. Imagen de una calle del barrio de la Magdalena de Ferrol, la urbe gallega donde menos se notó la reducción de la contaminación con la cuarentena por la pandemia de la covid-19. Foto: ECG

La calidad del aire en las siete grandes ciudades gallegas es ahora mejor que hace dos meses. El impacto de las medidas impuestas por el estado de alarma, con cuarentena obligatoria, limitación de desplazamientos y reducción creciente de la actividad a los sectores considerados esenciales contribuyó a reducir de manera significativa la contaminación atmosférica. En todas las urbes la polución es menor, y en seis de las siete los valores disminuyeron más de la mitad.

Según un informe elaborado por la Asociación para a Defensa Ecolóxica de Galiza (Adega), basándose en los datos registrados por las estaciones de vigilancia de calidad del aire de Meteogalicia, las cifras de polución de cada ciudad gallega del año pasado fueron comparadas con las de los meses anteriores al confinamiento, y después de él, separando este en dos fases (14-30 de marzo y 1 de abril a 1 de mayo).

Adega analizó la evolución de los niveles de óxidos de nitrógeno (NO y NO2), gases emitidos principalmente por el transporte, seguido de cerca de las fuentes de combustión industrial de gas natural, lignito, gasóleo, fuel, madera, etc.

Comparativa con el año 2019 En los meses de 2020 previos a la cuarentena sanitaria por la pandemia de la covid-19, ya se venía registrando una caída de NO2 con respecto a 2019 de alrededor del 38 %, indica Adega, pero todas las ciudades, excepto Ferrol, bajaron más de la mitad su contaminación con el parón económico impuesto. Entre todas destaca Vigo, donde las concentraciones del gas NO2 disminuyeron en un 71 % durante el confinamiento.

Además, Santiago de Compostela, Pontevedra, Ourense y Lugo también redujeron a más de la mitad su contaminación atmosférica por tráfico respecto al año pasado. En el caso de la capital de Galicia, fue del 57 %, seguida de Pontevedra y Ourense, ambas con un 55 % menos, y de Lugo, 54 %.

En el caso de la ciudad de A Coruña –cuya estación de medición de Meteogalicia es la única que no es de tráfico sino de fondo urbano, por lo que no está situada en una vía de gran tránsito–, la caída en la concentración de gas NO2 es del 49%.

Para la asociación ecologista, el caso más llamativo es Ferrol. En esta ciudad apenas se observaron cambios en la polución del aire debido al menor tráfico derivado del confinamiento. Los valores registrados indican un descenso del 41 % en la primera etapa de la cuarentena, poco importante ya que al inicio de año se dio un 38 % de caída con respecto a 2019. La asociación ecologista gallega indica que cabe pensar que en Ferrol no se redujo el tráfico como en las otras ciudades, o que este no es la fuente principal de NO2, sino la contaminación del sector industrial.

Diferencias entre etapas del confinamiento y principios de año El estudio compara la contaminación del aire entre la etapa inicial de la cuarentena y la segunda (cuando solo se permitían actividades esenciales), así como con respecto al inicio de año, sin emergencia sanitaria.

De este modo, los resultados del estudio indican que, como se esperaba, todas las urbes gallegas tuvieron una caída de la contaminación en la fase inicial del confinamiento respecto a meses anteriores de 2020.

En este caso, todas, menos Ferrol, bajaron más del 40 % su contaminación, siendo Vigo y Ourense, con un 64 y 58 %, respectivamente, las que más la redujeron. En la segunda etapa, del 1 de abril al 1 de mayo, siguió bajando, pero la evolución fue diferente. En Ourense, A Coruña y Ferrol se observa poca incidencia, cayendo la contaminación un 15 o 16 % con respecto a la etapa inicial de cuarentena. Se notó más en ciudades como Lugo y Pontevedra, con 42 y 34 % menos, respectivamente.

Observando las cifras de polución en toda la etapa de confinamiento estudiado, del 14 de marzo al 1 de mayo, Vigo, Ourense, Lugo y Pontevedra son las ciudades que más notaron los efectos de la reducción del tráfico rodado con respecto a los meses anteiores al estado de alarma.

Valores máximos Las ciudades de Santiago y Ourense registraron los valores máximos de gas NO2 desde inicios del presente año, pero fueron fuera del periodo de confinamiento. El pico más alto en cuarentena fue en Ferrol, seguido de Santiago . En ningún caso se superaron los niveles máximos permitidos.

Menos tráfico rodado

··· Adega recuerda que la OMS advierte de que la contaminación atmosférica a corto y largo plazo puede afectar a la salud de las personas y del medioambiente. Además, según su estudio y teniendo en cuenta que las circunstancias son excepcionales, los datos indican que el tráfico rodado es la principal causa de contaminación urbana, por lo que algunas de las medidas para mejorar el aire pasarían por priorizar el transporte público, favorecer la bicicleta y los desplazamientos a pie, invertir en transporte colectivo de bajas emisiones, potenciar alternativas como el metro ligero en algunas ciudades y reducir el transporte de mercancías por carretera. También aboga por el mercado local y de proximidad e incentivar la eficiencia y el ahorro para reducir el consumo energético, unido al mantenimiento de la biodiversidad y los entornos naturales.

En las siete grandes urbes

• A Coruña: en la primera etapa de cuarentena bajó un 41%, y un 15 % más en la segunda. Con

respecto a 2019, un 57% y un 42%.

• Ferrol: es la única ciudad sin cambios significativos con el estado de alarma. Registró los valores más altos de contaminación durante el confinamiento.

• Santiago : bajó el NO2 a la mitad con la segunda etapa de aislamiento con respecto a inicios del año. Comparado con 2019 en las mismas fechas, cayó un 65% la polución.

• Lugo: en la etapa inicial bajó un 42% y un 59% en la segunda parte; con respecto a 2019 fue de 50 y 57 % menos respectivamente.

• Ourense : la mayor caída fue al principio, del 58%, y con respecto al año pasado, del 55%. Su concentración de óxidos de nitrógeno casi duplica el nivel crítico anual de protección de la vegetación por encima del que puede haber efectos nocivos para plantas, árboles o ecosistemas.

• Pontevedra: registró una bajada de 44% en la primera etapa de confinamiento con respecto a antes, y del 57% en la segunda. Frente a 2019, del 53 y 55%.

• Vigo: es la ciudad con más disminución de polución, un 69% con respecto a los meses previos al estado de alarma y de un 71 % con respecto al año 2019.