El ahorro en Galicia en lo peor de la pandemia crece en cerca de 3.600 millones

Depósitos y cuentas corrientes pasaron de los 67.279 millones de marzo a 70.856 a final del verano // Crece un 6,36 % interanual
Banca
Santi Riveiro
Campaña de fomento del ahorro entre los más pequeños de Abanca y Afundación

El que guarda siempre tiene. Si, aun por encima, apenas se puede viajar y la desconfianza sobre el porvenir económico corre parejo a la evolución de una pandemia como la del coronavirus... es lógico que se incremente el ahorro. Si atendemos a los últimos datos del Banco de España, los gallegos acrecentaron el dinero que confiaban a las entidades financiera tanto en cuentas corrientes, como en las de ahorro y los depósitos a plazo 70.856 millones de euros al cierre del pasado tercer trimestre de 2020, que si bien es similar a la de junio (70.990 millones, baja el 0,19 %), crece en cerca de 3.600 millones frente a los 67.279 de marzo.

Cabe recordar que el dato del segundo trimestre marcó el nivel más alto del ahorro computado nunca por el Banco de España en Galicia. Un volumen que si nos vamos una década atrás estaba, a finales de 2011, en 53.224 millones de euros. A años luz.

En el tercer mes del pasado ejercicio, a mediados, se iniciaba el estado de alarma y el confinamiento, junto a la hibernación productiva para capear la COVID. En apenas seis meses se acrecentó el ahorro más seguro –también el que menos renta, con tasas negativas si atendemos a la inflación– en un 5,3 %. Si nos vamos un año atrás, al segundo trimestre de 2019, cuando se situaba en 66.617 millones confiados a las entidades, el incremento, sobre los cuatro mil millones, roza el 6,4 %.

Gracias al Banco de España sabemos que de los 70.856 millones de euros que a finales del verano ahorraban vía cuentas y depósitos los gallegos, 3.240 millones correspondían a sus administraciones públicas. El grueso, los restantes 67.616 millones, estaban en manos de los particulares y empresas.

Si se atiende al tipo de producto contratado con la banca, computado como ahorro a la vista había consignados 55.959 millones al cierre de abril, mientras que totalizaban los restantes 11.657 millones los depósito a plazo. Esta fórmula cae en picado, debido a que en la actualidad su rentabilidad, atendiendo al IPC, resulta ya no nula, sino negativa, y frente a las cuentas corrientes obliga a mantener por cierto tiempo el dinero parado, sin poder tocarlo.

Una plusmarca estatal. Nunca antes en la historia en nuestro país se había alcanzado el nivel del tercer trimestre de 2020 cuando, según el Banco de España, el conjunto del Estado vio como sus administraciones, sus hogares y sus empresas totalizaban más de 1,37 billones de euros; tres meses antes era tres mil quinientos millones inferior. En marzo no se alcanzaban los 1,3 billones, y un año atrás, en septiembre de 2019, era mas de 97.000 millones inferior, por lo que ha crecido un 7,6 %, más de un punto sobre el dato gallego.