El mes de julio fue el más frío en una década pero más seco de lo habitual

La conselleira de Medio Ambiente explica que la baja radiación solar registrada fue la responsable de la “sensación de mal tiempo” generalizada // Llovió la mitad de lo esperado para la época del año
Informe climatológico
Salomé Barba
Resumen. Gente disfrutando de una terraza de la hostelería compostelana, sin lluvia pero con temperaturas más bajas de lo esperado en julio. Foto: Fernando Blanco

El verano se resiste a acabar de llegar a la comunidad gallega, en eso parece haber un consenso generalizado. Las borrascas sucesivas que llegan a Galicia desde el solsticio, unidas a las bajas temperaturas dejan una sensación de mal tiempo, aunque la realidad no es tan negativa.

Con el mes de agosto ya estrenado, las previsiones meteorológicas se han convertido en este anómalo estío 2021 en compañeras inseparables de gallegos y visitantes. Son imprescindibles para saber si es necesario sacar el paraguas a la calle, ahora que la mayoría ya se ha acostumbrado a usar alguna prenda de abrigo. No está siendo un buen verano, pero la realidad no es tan negativa.

Así, según explicó este miércoles la conselleira de Medio Ambiente, Territorio e Vivenda, Ángeles Vázquez, en una visita a la sede de Meteogalicia (el servicio meteorológico autonómico) en Santiago –donde avanzó el informe climatológico de julio–, el mes pasado sí fue frío. Las bajas temperaturas registradas lo convirtieron en el peor de la década, más concretamente “en el julio más frío desde 2012”, pero no fue tan húmedo como la mayoría cree.

“El séptimo mes del año fue inestable e irregular, con frío en las comarcas atlánticas, seco y con pocos días de sol”, resumió la conselleira en su intervención. El valor medio de las temperaturas se situó en los 19 º C, lo que resulta una anomalía de -0.66º C respeto al período de referencia para el conjunto de la comunidad y hace que “este período se considere como frío y que haya que mirar casi una década hacia atrás para encontrar un precedente similar”. La media de las máximas se situó en los 23,2º C, mientras la de las mínimas fue de 12,4º C.

NOCHES TROPICALES EN EL CAMBIO DE QUINCENA. El período más cálido del mes se registró a lo largo de tres jornadas consecutivas –15, 16 y 17 de julio–, con noches tropicales en puntos del litoral y temperaturas que fueron ascendiendo hasta rozar los 40 grados centígrados en puntos aislados del interior.

En todo caso, las temperaturas alcanzaron medias normales en puntos de Ourense, Lugo y el norte de A Coruña, mientras que las zonas afectadas por el sudoeste y el paso de las borrascas, Pontevedra y sur de A Coruña, fueron las que estuvieron por debajo del esperado.

POCO SOL. Entonces, ¿por qué la mayoría se ha quedado con la idea de que llovió mucho? El principal problema de esta impresión errónea parece radicar en que “la radiación solar estuvo muy por debajo de la inscrita el año pasado, cuando se superó por mucho la media, lo que “aumentó la sensación de mal tiempo” en Galicia el pasado mes, como explicó Vázquez ante los medios de comunicación.

Así las cosas, destacar que, en general, fue un mes seco, puesto que los frentes que llegaron no fueron muy activos, alcanzando valores normales únicamente en puntos de Pontevedra y del sur de A Coruña. De hecho, las precipitaciones estuvieron un 51 % por debajo del valor climático normal. Menos de la mitad.

La lluvia media acumulada fue de 23,6 litros el medio cuadrado, siendo las medias más elevadas en el oeste de Galicia con valores próximos a los 120 l/m2 en la comarca del Xallas, en el Barbanza y en el ayuntamiento de Cuntis; mientras que los valores más bajos se dieron en gran parte de la provincia de Ourense, con localidades en las que no se registró precipitación.

Desde el servicio meteorológico autonómico, Meteogalicia, María Souto, en su intervención ante los medios presentes en el acto, incidió en que fue un mes marcado por la presencia de nubes bajas y nieblas, pero poca precipitación. En cualquier caso, puntualizó que hubo menos radiación solar en la comunidad gallega en julio de 2018 que este julio pasado, si bien el de hace un años fue “anormalmente alto”.

AGOSTO INCIERTO. Ante una de las preguntas más recurrentes estos días. ¿Cómo será este mes de agosto? Ángeles Vázquez avanzó que “empieza como finaliza el mes de julio, con inestabilidad y escasa visibilidad”. De todas formas, como en lo que a meteorología se refiere las predicciones no siempre se cumplen, sobre todo si son muy adelantadas, recordó que habrá que esperar hasta la próxima semana para verificar si se registra una mejoría, tal y como parecen indicar los últimos modelos.

En todo caso, indicó que en la comunidad gallega “la calidad del aire es buena, con zonas para conocer y por las que pasear”, por lo que animó a vecinos y visitantes “a disfrutar del verde de Galicia”.

BAJO NIVEL DE OZONO, BUENA CALIDAD DEL AIRE. “El ozono se forma por interacción de la radiación solar con los contaminantes del tráfico, la industria, las calefacciones. Sin la radiación, el ozono no se va a formar, por lo que no tenemos que estar pendientes ni dar avisos a la población”, indicó Nuria Gallego, del servicio de Calidad Ambiental, en su intervención durante la visita a la sede de Meteogalicia.

Para agosto y septiembre, María Souto advirtió de que las predicciones a largo plazo “fallan”, por lo que se centró en que “lo que queda de semana se va a continuar con tiempo húmedo, con temperaturas bajas para la época del año y precipitación, escasa” y “a partir de la próxima parece que se anima un poco el anticiclón y la tendencia es tirar hacia un tiempo más seco”, lo esperado para el verano, tal y como recoge Europa Press.

La previsión es “que vengan los vientos del norte, del verano en Galicia, y permitan un ascenso de las temperaturas”. Además, ratificó que “parece que hay una tendencia” en los últimos años hacia meses de septiembre y octubre con “valores por encima de la media en temperaturas”, pero agregó que por ahora esto no tiene “ningún valor estadístico”.

Por último, sobre la campaña de alto riesgo de incendios forestales (competencia de Medio Rural), la responsable de Medio Ambiente indicó que por ahora el número es “bajo” y no hay fuegos “tan grandes” como otros años, también por el trabajo de los servicios de prevención.