En el contenedor de envases se dejan mal el 26 % de los residuos

Los recipientes para depositar la basura se encuentran distribuidos por el 99,4% del territorio autonómico // La recogida en Galicia supera a la media del Estado
Ecología
Alberto Martínez
Contenedores de orgánico (izda), envases, vidrio, papel, envases y orgánicos. Foto: Almara

La concienciación de los gallegos en el reciclaje va en aumento. Pero aún es necesario que sea mayor para que se separen los restos de las diversas basuras. Está clara la división de lo orgánico e inorgánico, pero no tanto para la población en lo que se tira en este último contenedor. Por ello, las entidades ambientales y las administraciones inciden en su importancia, ya que la reutilización del plástico, latas de aluminio, papel y cartón, así como el vidrio y pilas, supone un menor impacto ambiental a la naturaleza.

Según los últimos datos anuales de Ecoembes, la entidad que coordina las acciones de las diversas empresas que se dedican al reciclaje, si bien el número de contenedores existentes en todos los rincones de la autonomía llegan al 99,4% de la población de las ciudades y de prácticamente todo el rural, en cuanto a la correcta recogida de los residuos se apunta que en los contenedores amarillos para envases, el 26% de la basura depositada es impropia del mismo, bien porque corresponde a orgánica, bien porque no es lo que se debe dejar en ese recipiente.

Por otra parte, el impacto de la pandemia entre los ciudadanos, en el que la actividad de la hostelería en los meses del estado de alarma mermó hasta casi la paralización (solo se servían comidas para llevar en algunos restaurantes), se compensó con el acopio de alimentos en los domicilios. Y por ello, como detalle, desde la consellería de Medio Ambiente de la Xunta se constató que hubo un incremento de más del 25% en la recogida selectiva de los envases en el mes de marzo, con respecto al año anterior. Con ello se mantiene la tendencia alcista marcada en la última década.

Y es así porque los gallegos incrementaron en 2019, con respecto al ejercicio anterior, en poco más de un 10,1% los depósitos en el llamado contenedor amarillo al cual van los envases de plástico, latas y tetrabricks. Y, de media, cada uno de los ciudadanos dejó unos 12,9 kilogramos en ese año. Por su parte, en el contenedor azul se depositaron unos 13,9 kg de papel y cartón por persona, con un aumento interanual del 8,4%.

En total, entre ambos residuos se recogieron en los 37.005 contenedores amarillos y 13.902 azules, repartidos por toda la comunidad autónoma, unas 69.570 toneladas de ese tipo de productos. Y si bien destaca el dato que en los amarillos (envases) en el último lustro la tendencia ascendente de recogida acumuló un 31,3%, hay que poner en valor que solo en el año pasado. Galicia tiene un punto porcentual por encima de la media española.

En el Estado, fueron algo más de un millón y medio las toneladas de productos reciclados de los segmentos antes señalados. Ello supuso que se evitará la emisión de 1,67 millones de toneladas de CO2 a la atmósfera, así como ahorrar el consumo de 20,74 millones de metros cúbicos de agua, 6,36 millones de megawatios de energía, y 1,5 millones de toneladas de materias primas. A Galicia le corresponde el 4,6% de estas cifras.