Feijóo avisa de que el ruido no frenará los expedientes por el vaciado de los embalses

Insiste en que el Gobierno central es responsable de no haber controlado el vaciado en la cuenca Miño-Sil
Consello de la Xunta
Íñigo Caínzos
SITUACIÓN CRÍTICA. El embalse de Portas, bajo mínimos. Foto: Rosa Veiga / Europa Press

El vaciado masivo de cuatro embalses de la cuenca hidrográfica Miño-Sil sigue ocupando buena parte del debate político autonómico. El presidente gallego volvió a desviar los balones que le llegaron, insistiendo en que la responsabilidad de que no se controlara el vaciado era del Gobierno central, y pidiendo seriedad en la cuestión de los correos en los que Iberdrola advertía de la intención de proceder a la turbinación. Además, aseguró que, por más ruido que se genere, la Xunta seguirá adelante con los expedientes sancionadores a las hidroeléctricas.

Feijóo quiso ser tajante y defenderse tras los últimos comentarios desde la oposición una vez que se conoció que Iberdrola había mandado dos comunicaciones avisando de que querían proceder a vaciar los embalses. Feijóo considera “unha broma” hablar de que se remitió un fax al 112. “Menos mal que non o remitiron a un hospital ou un centro de saúde”, ironizó.

En este sentido, Feijóo instó a toda la clase política a tratar con seriedad el asunto. “Da a sensación de que nos estamos tomando a broma á xente”, lamentó, y se preguntó si “non será unha estratexia pactada entre a Confederación e as empresas”. “Eu non quero pensar mal”, dijo.

Feijóo recalcó que se ha pronunciado “de forma reiterada e clara” sobre este asunto, y volvió a afirmar que “a competencia é exclusiva do Goberno central”.

En este sentido, recordó que la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, “dixo que era lamentable e que se comprometía a modificar a normativa”. En opinión del presidente, “non se pode asumir a autoría dunha forma tan directa”.

El presidente considera “sorprendente” que se esté buscando “facer ruído”, y denunció que “haxa políticos en Galicia que estén mentindo aos galegos”.

A renglón seguido, defendió la forma de actuar de su Gabinete, al asegurar que contaron “a verdade dende o principio”. Una verdad que, según él, es que “a Confederación (Hidrográfica Miño-Sil) non pediu permiso”. “A nós, quen nolo ten que notificar, é a Confederación”, zanjó. En repetidas ocasiones Feijóo dijo que “a verdade” era que no habían recibido esa solicitud. Por eso, avisó de que “polo tanto vai caer un expediente sancionador”.

Así, aseveró que “non imos parar o expediente, por moito ruído que se faga”. Unas sanciones que podrían llegar hasta los dos millones de euros, de acuerdo con la ley de patrimonio natural.

Feijóo pidió “respeto polos galegos” al pedir a la oposición que deje de hacer ruido cargando y responsabilizando a la Xunta del vaciado de los embalses cuando son competencia “exclusiva” de la Confederación, que dependen del Gobierno central.

De hecho, declaró que la Xunta no responsabilizaría a los concellos en los que se ubican los embalses de la cuenca Galicia-Costa, y que es de gestión autonómica, en caso de que sucediese algo similar.