Galicia declara sector estratégico a toda la industria electrointensiva

Galicia no está dispuesta a dejar caer a plomo a toda su industria hiperelectrointensiva y los miles de empleos que genera sin dar la batalla. Así lo dejó claro ayer el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, quien informó de la aprobación de un plan que declara el sector como “esencial y estratégico” y que le dará prioridad en la gestión de solicitudas y ayudas.

“Lo que pretendemos es activar una serie de medidas de acompañamiento que permitan defender la actividad y mantener los 5.000 puestos de trabajo que están en riesgo en la comunidad”, defendió en la rueda de prensa tras la reunión semanal de su Ejecutivo, anticipando que todos los proyectos industriales de ampliación, modernización y transformación se considerarán estratégicos.

En lo que respecta al ámbito competencial del Estado, el Ejecutivo autonómico propone la elaboración de un Plan nacional que permita optar al instrumento de recuperación de la Unión Europea dotado con 750.000 millones de euros. “Proponemos el diseño de un mecanismo de subasta específica para los contratos bilaterales de las electrointensivas y también préstamos participativos con fondos de la comunidad para apoyar los planes industriales de las empresas hiperelectrointensivas que quieran invertir en su maquinaria o en sus procesos productivos”, explicó el mandatario.

El de Os Peares insistió en que el Gobierno central debe proceder a la convocatoria inmediata de la subasta de interrumpibilidad –que “ya tendría que haber sido convocada porque es semestral”–; incrementar el presupuesto de las compensaciones por emisiones de CO2, pasando desde los 6 millones actuales a los 275 millones que permite la normativa europea, y a la aprobación del Estatuto del consumidor electrointensivo.

Durante su intervención tras el Consello, el presidente de la Xunta retó al Gobierno que dirige Pedro Sánchez a que, “si quiere nacionalizar” la factoría de Alcoa en San Cibrao, en Cervo (Lugo), “que lo haga”. “Pero que lo haga ya, mañana y no pasado”, enfatizó, dando a entender que sigue convencido de que solo un precio “viable” de la energía garantiza su futuro.

A preguntas de la prensa, especificó su punto de vista: “Si una empresa se nacionaliza, posteriormente vuelve al mercado ordinario. No conozco a ningún gobierno de la UE que tenga una fábrica de aluminio ni un INI (Instituto Nacional de Industria) como existía en épocas pretéritas. Lo lógico es que se nacionalice y posteriormente busque un comprador. Lo primero es modificar el precio de la energía y con eso invitar a Alcoa primero a retirar el ERE y después a dejar paso a otro”.

En este sentido, manifestó tener constancia de que hay “contactos informales” para que, en el momento en el que el precio de la energía vuelva a los 30 0 35 euros por megavatio, haya compañías y capital que “valorarían automáticamente” comprar esa compañía. “Pero mientras no haya un precio competitivo todo el mundo se va a alejar”.

Por ello, tras censurar “tomaduras de pelo” y “engaños” a los trabajadores –él mismo ha confesado sentirse “engañado” por Pedro Sánchez y sus ministros en cuestiones como el “tan cacareado” estatuto electrointensivo del que “aún no se conoce ni el borrador–, Feijóo volvió a urgir convocar la subasta de interrumpibilidad, con el fin de “no ponérselo fácil” a la multinacional y “desautorizar el ERE” anunciado, que afectaría a 534 trabajadores.

“Buscan excusas para llegar al 12 de julio”. Visiblemente molesto, Feijóo tachó de “broma de mal gusto” que pueda responsabilizarse a la Xunta de la situación de Alcoa. ”¿También somos los responsables de la fábrica de Avilés?, se preguntó. “El Gobierno busca una excusa para llegar al 12 de julio –fecha de las elecciones en Galicia– y cerrar Alcoa”, zanjó.