Galicia priorizará varios proyectos entre los que presenta a los fondos Next Gen

El Gobierno y la Xunta acordaron ayer durante dos horas de reunión ir de la mano en el plan de recuperación para combatir los efectos de la pandemia. El encuentro en Santiago entre los representantes de ambas administraciones, encabezadas por el presidente gallego, Alberto Núñez Feijóo, y la vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, sirvió para radiografiar la situación económica actual y para aprovechar al máximo las oportunidades del plan postpandemia.

Nadia Calviño, que puso en valor la evolución positiva del mercado laboral y elogió que Galicia se encuentre entre las comunidades pioneras en vacunación contra el coronavirus, destacó que salud y economía “van de la mano” y ahora toca abordar los proyectos que serán objeto de apoyo dentro del plan de recuperación.

En ese sentido, pidió a Feijóo que “señale” al Gobierno central cuáles son los “proyectos prioritarios” de la comunidad autónoma para colaborar en su puesta en marcha con el objeto de “hacerlos realidad”.

La vicepresidenta recordó que hay territorios que envían más de un centenar de propuestas y que el Ejecutivo presidido por Pedro Sánchez quiere conocer “cuáles son los dos o tres más emblemáticos”. Así, detalló podrá hacer una ordenación de los que tienen ámbitos autonómicos, los que se puedan desarrollar en varias comunidades autónomas, y los que tengan dimensión estatal.

El presidente Feijóo indicó que, en línea con el planteamiento gubernamental, Galicia “priorizará los trascendentales”, aunque en la reunión de este jueves expuso a la vicepresidenta los planes genéricos con los que trabaja en estos momentos su Ejecutivo.

Entre éstos, destacó en el ámbito forestal la fábrica de fibra textil, que desde la administración gallega propondrán como candidata a los fondos Next Generation. En el campo agroalimentario y conservero estarán proyectos de Estrella Galicia y Anfaco; en el de la automoción los de Stellantis; a los que se sumarán otras iniciativas relacionadas con las áreas naval y aeronáutica.

Feijóo puso el foco, al igual que Calviño, en la importancia de la “cogobernanza” y demandó criterios de elegilibilidad” para poder “competir en buena lid” ya que hasta este momento no hay convocatorias públicas. Para el presidente de la Xunta el plan de recuperación que se nutrirá de los fondos europeos Next Generation debe estar centrado en modernizar la economía, crear empleo y mejorar la productividad.

“Nos interesan muchísimo los fondos”, abundó Feijóo, que añadió que se trata de acertar en la iniciativas, más allá de repartir ayudas. Y en la línea con la demanda planteada por la vicepresidenta de priorizar los proyectos que serán objeto de financiación,remarcó: “Nos interesa mucho trasladarle (al Gobierno) por escrito, documentados y justificados” cuáles serán esas propuestas.

En todo caso, alertó de que el reparto económico no debe perjudicar a Galicia, como sucedió con las primeras partidas del fondo covid, aunque reconoció que después esa “infrafinanciación” de la comunidad se corrigió en la nueva entrega de tal manera que en el último tramo Galicia recuperó posiciones.

Crisis industrial Feijóo aprovechó, por otro lado, dentro del repaso general de la situación para poner encima de la mesa la “crisis industrial que padece Galicia” con el cierre de las centrales de Meirama y As Pontes, la “posibilidad de cierre” de Ence en Pontevedra y los procesos por los que está atravesando Alu Ibérica. “Estamos preocupados por la pérdida de 15.000 o 16.000 empleos industriales”, subrayó ante Calviño Alberto Núñez Feijóo.

Al mismo tiempo, espoleó a la vicepresidenta con las dificultades que se ciernen sobre Ferrol con el cierre de Siemens Gamesa, de la central de As Pontes y con los retrasos en la construcción de las fragatas. Además, aunque Calviño carece de competencias, le adelantó que planteará a la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, que “extienda” las deducciones fiscales del Xacobeo, que en esta celebración es bianual, hasta el año 2023.

El encuentro, calificado por ambos como cordial, constructivo y provechoso, también sirvió para que Calviño y Feijóo se pronunciasen sobre la inclusión financiera, para que las entidades puedan atender las demandas derivadas de la dispersión poblacional además con una población muy envejecida.

Con el cierre de sucursales y cajeros, Nadia Calviño apostó por un “código de buenas prácticas” que hahan posible que toda la población gallega tenga acceso a la prestación de servicios. Y se mostró favorable a que el Banco de España haga alguna recomendación específica en ese sentido.

Núñez Feijóo coincidió con Calviño en que es necesario dar cobertura a toda la población y que en la Xunta también están preocupados por la “exclusión financiera”. De todas formas, dejó claro que la Xunta no está cruzada de manos ante este problema y subrayó el acuerdo alcanzado entre el gobierno autonómico y la Federación Galega de Municipios e Provincias (Fegamp) que, con ayudas, permitirá dar cobertura a 55.000 gallegos que se quedaron sin oficinas bancarias y sin cajeros.

El inquilino de Monte Pío emplazó, de todas formas, a la vicepresidenta del Gobierno central y al Banco de España a adoptar medidas “para intentar ordenar lo que el sector (financiero) no ordena”.