La mítica Proentia romana de Sober quiere ver la luz

¿Qué esconde el subsuelo de la parroquia de Santa María de Proendos en el concello lucense de Sober? Muy pronto se desvelará parte de ese enigma ya que para finales de este verano se van a llevar adelante una serie de catas arqueológicas en lo que se considera un yacimiento romano y medieval, que fue descubierto el pasado año en esa localidad, corazón de la Ribeira Sacra y cuna de los afamados vinos de Amandi que, según las leyendas, se servían en la mesa de los emperadores romanos.

La iniciativa, impulsada por el ayuntamiento que preside Luis Fernández Guitián, cuenta con el apoyo financiero de la Consellería de Cultura, que además se encargará de contratar las obras. Las excavaciones previstas las ejecutará la firma especializada Estela Arqueoloxía e Patrimonio, la misma que, por encargo del organismo local, había llevado a cabo el pasado años los sondeos con georradar y mediante la técnica de prospección magnética en el subsuelo de la parroquia de Proendos, en una superficie de entre 4 y 5 hectáreas.

Los resultados de los sondeos hechos revelaron la existencia, a un metro de profundidad, de diferentes construcciones que se datan en la época romana, entre las que sobresale una gran edificación. El conjunto de lo que se supone una villa romana abarca unos 3.000 metros cuadrados de extensión.

Los arqueólogos de la empresa Estela apuntan que esa gran construcción podría ser la residencia de algún noble romano, que configuraría el núcleo de una explotación agrícola asentada en estas fértiles tierras de Sober.

Los investigadores también señalaron que este conjunto arquitectónico hallado bajo el suelo también podría ser una población menor (la mítica Proentia) configurada con un complejo entramado urbano y ligada a una vía de comunicación.

Lo cierto es que, desde hace décadas, se han encontrado en este lugar numerosos restos romanos. Esta circunstancia llevó a que algunos historiadores situaran aquí a Proentia, un asentamiento de la época del imperio romano en suelo gallego y también un gran desconocido, que ahora puede salir del anonimato.

TRAZA ROMANA. De las cinco catas previstas para finales del verano, tres de ellas se harán donde el georrdar localizó los vestigios de un gran edificio, con una estructura semicircular. En este lugar, según la morfología de los restos detectados, podría ubicarse una villa de la época romana, según las conjeturas del los expertos de Estela.

Los otros dos sondeos se realizarán en un área donde se hallaron unas estructuras constructivas en forma de parrilla que, según se cree, pudo haber sido un aljibe o bien un almacén de grano. En este sector se detectaron también restos de otras edificaciones y de lo que semejan ser calles o caminos. Los arqueólogos responsables de las prospecciones consideran que podrían ser de los primeros siglos de época medieval.

La selección de los lugares los que se procederá a las catas responde a la intención de poner al descubierto restos de las distintas épocas históricas que parecen estar reunidos en este yacimiento.

Consolidar esos restos patrimoniales y poder mostrarlos al público es uno de los objetivos de futuro que persigue el organismo local, según explicó el regidor Fernández Guitián. En su opinión, sería un interesante y novedoso recurso para la dinamización turística y cultural de Sober y, por extensión, de la Ribeira Sacra.

Disponer de un centro de interpretación del mundo castreño, romano y visigodo al aire libre en la parroquia de Proendos es otra de las aspiraciones que maneja el alcalde para más adelante.

ANTECEDENTES. La firma Estela señala en su web, como breve contextualización de este hallazgo, que las primeras noticias que tenemos sobre este yacimiento son obra del presbítero Claudio Guitián en 1867, seguido posteriormente por el historiador lucense Manuel Vázquez Seijas con unas prospecciones en los años cuarenta del pasado siglo en las que encontró numerosos materiales de origen galaico-romano.

Además, en Proendos son numerosos los vecinos que tienen en sus casas algún resto arqueológico de origen castreño, romano o medieval, descubiertos mientras araban las tierras de su propiedad. Por ello se piensa que allí está la legendaria Proencia que relatan los historiadores romanos.

También, otros muchos investigadores situaron en este lugar el “misterioso” Castro Dactonium, capital de los lemavos, mencionado por autores clásicos como Estrabón, Plinio el Viejo o Ptolomeo, galaicorromanos como Hidacio de Chaves y también nombrado en algunas inscripciones antiguas como el llamado Itinerario de Barro de Astorga y en estelas funerarias o lápidas militares romanas encontradas en Arjona (Jaén) así como en la Mauritania Tingitana. En poco tiempo se pondrá luz a alguna de esas conjeturas.