La pandemia hunde la venta de cajetillas en Galicia, que fuma más tabaco de liar y pipa
El sector ligado a la nicotina, como otros tantos, sigue afectado tanto por el contexto de falta de recuperación del turismo y la modificación de hábitos sociales, a la baja también por la mayor concienciación en materia de salud, al tiempo que continúa al alza el fenómeno de las fábricas ilegales. Así se denuncia desde la Mesa del Tabaco, organización que agrupa a agricultores, transformadores, industria, mayoristas, fabricantes de máquinas expendedoras o estancos, además de la CEOE y las federaciones agroalimentarias de UGT y CC.OO.
Los datos para el conjunto de España apuntan a que las ventas de tabaco registraron una caída próxima al 5 % en 2021 si se comparan con el ejercicio prepandemia. Dado que el punto de partida de 2020 era de mínimos históricos por el impacto de la covid, éstas tuvieron una ligera recuperación en relación al ejercicio precedente. En Galicia el impacto económico fue algo inferior, del 3,8 % frente a 2019, y de un ligero 0,76 % frente al ejercicio anterior.
En total, las ventas en volumen de cigarrillos, labor que supone el 84 % del mercado, fueron un 6,5 % inferiores a 2019 y se situaron en 2.096,8 millones de cajetillas en el conjunto de España. Si se comparan con el año 2020 suben un 1,75 %. En la comunidad gallega, las 123.787.637 cajetillas de antes de la covid descendieron en siete millones (-5,7 %), a 116.785.175, dos millones menos que en 2020 (-1,56 %). Así, en euros si hace dos años y sin pandemia el negocio al vender paquetes de este tabaco rozaba los 563 millones, en 2020 caían a 537,8 millones y el curso pasado a 532 millones, con una caída acumulada del 5,4 %.
En conjunto, las ventas del sector tabaquero en España sumaron 11.327,7 millones de euros, lo que supone una caída del 4,53 % en relación a 2019. La recaudación fiscal derivada de las labores de tabaco –impuestos especiales e IVA– sumó 8.636,9 millones de euros, casi el cinco por ciento menos al año prepandemia, según los últimos datos del Comisionado para el Mercado de Tabacos. Las ventas totales en Galicia fueron algo superiores a 616,8 millones, cuando en 2020 fueron 621,6 (-0,76 %) y antes de la irrupción del coronavirus de 641,4 millones (-3,8 %).
Contrastan las caídas en cigarrillos industriales con un repunte, más constante desde hace años, del tabaco de liar. En 2021 fueron 304.876 los kilos vendidos en la comunidad gallega, ligeramente (+0,28 %) por encima de 2020, pero un 12,5 % superior a los 270.958 kilogramos prepandémicos. Los 46,5 millones de 2019 suben el 13,4 %, a 52,8 millones, en 2021.
Pero lo que más repunta es la picadura para pipa. De los 27.643 kilos de 2019 han repuntado el año pasado casi un 29 % a 35.639 kilogramos, algo más que el dato anual anterior (1,38 %). El negocio pasó de de algo más de cuatro millones hasta 5.950.170 € (+45,5 %).
El sector del tabaco español abarca el cultivo y primera transformación de hoja de tabaco, concentrado en Extremadura –la mayor región productora de la Unión Europea–, la actividad de producción de labores en Canarias y Cantabria y de máquinas expendedoras en Navarra, además de las redes de distribución mayorista y minorista que se extiende por toda la geografía. La red de estancos, según la Mesa del Tabaco, “jugó un importante papel como punto de servicio público durante toda la pandemia”.