Ninguno de los parlamentarios gallegos destaca por tener patrimonio holgado

Un año más, en el claro ejercicio de transparencia, los diputados del Parlamento de Galicia desnudan sus patrimonios ante la ciudadanía. Lo hacen colgando su declaración en la página web de la institución. Entre los datos, están sus sueldos, la cuota líquida pagada en el ejercicio anterior de la declaración de la renta, los bienes inmuebles, el saldo bancario tanto corriente y de ahorro, los vehículos, el importe de las acciones cotizadas, y lo que tienen pendiente de cancelar en cuanto a préstamos.

En este ejercicio, es precisamente el presidente de la Cámara do Hórreo, el popular Miguel Ángel Santalices, nacido en 1955 en Bande (Ourense) el que dispone de mayor patrimonio. Ello es fruto de una larga trayectoria como funcionario del cuerpo facultativo superior de la Xunta en la Administración Sanitaria. Como médico de profesión dirigió, entre otros, el hospital Xeral de Vigo y el de Ourense. De ahí que en su declaración de la renta pague más de 33.000 euros, y ante la Cámara declare dos pisos, una finca, un bajo comercial y dos plazas de garaje así como una participación similar dineraria en fondos de inversión y cuentas bancarias que rondan en total una cifra que es la mitad de la anterior.

El caso contrario es el del diputado más joven de la Cámara, Daniel Castro García, del BNG. Nacido en Ribadeo en 1996 y estudiante en la USC de Filoloxía Galega, solo dispone –en el momento de ser elegido– una cuenta de ahorro de 1.942,19 euros.

Una cuestión que no todos los representantes gallegos notifican es su sueldo, al sobreentender que son los de 56.000 a 109.000 euros, según el cargo, por ejercer su labor en la Cámara del Hórreo

Entre los que más patrimonio disponen se encuentra también el conselleiro de Medio Rural, José González con dos pisos y cuatro fincas además de acciones por un valor que superan los 160.000 euros pero también debe hacer frente a cuatros préstamos.

Alberto Núñez Feijóo, por su parte declara una vivienda en Madrid y otra en Vigo así como sendas fincas en Ames y en Moaña, pendientes de valoración catastral. Para ésta última debe ir devolviendo un alto préstamo con el que pagó la vivienda de la parcela, según apunta Europa Press.

Otro diputado que cuenta con buen patrimonio bienes inmuebles (pisos y fincas), aunque son porcentajes fruto de una herencia, es el exconselleiro de Sanidade, Jesús Vázquez. Y entre los populares, la nota curiosa la pone Paula Prado al declarar una embarcación marina.

En cuanto a los nacionalistas, es Mercedes Queixas la que dispone de un mayor patrimonio. Éste procede de una herencia con cinco bienes inmobiliarios de distinto tipo, superando a su líder Ana Pontón quien dispone de piso propio en Santiago, y duplicó sus ahorros, con respecto a la anterior legislatura.

Finalmente entre los socialistas, el de su portavoz Gonzalo Caballero se corresponde con el de un experimentado profesor universitario, pero se compensa con lo que tiene aún por pagar de una hipoteca por una vivienda que se compró hace un año, y en la que invirtió parte de su ahorro. Así Pablo Arangüena lo supera en liquidez al tener pendiente menos de 10.000 euros de un préstamo a pagar, lo mismo que Martín Seco, ingeniero químico de la refinería coruñesa de Repsol.