Primera semana de agosto que se despide con calor, pero no tardarán en llegar las lluvias

Ya el miércoles se dejarán sentir en Ourense y al sur de Lugo, pero llegarán de forma generalizada a la comunidad el jueves
El Tiempo
Ángela Precedo
nigrán. Una bañista se refresca en una ducha en la playa antes de que el ayuntamiento decidiese cerrarlas para ahorrar agua durante esta prolongada sequía. Foto: Salvador Sas

La primera semana de agosto se despide con una jornada de cielos despejados en la mayoría de la comunidad gallega que se ven tapados por el humo en las zonas donde los incendios más problemas están dando, como es el caso de la comarca del Barbanza. Las temperaturas son elevadas, si bien no extremas, con termómetros que llegarón a marcar una máxima de 38,9 grados ayer a las 17.20 horas en el municipio ourensano de Vilamartín de Valdeorras.

Esta situación se repetirá hoy lunes, según apunta MeteoGalicia en sus previsiones, que prevé altas temperaturas especialmente en la zona de Ourense (hasta los 38 grados) y, soprendentemente, en la de Santiago (hasta los 32). El resto de Galicia se quedará por debajo de los 30 grados y causa especial expectación la situación en Vigo, que registrará las temperaturas máximas más bajas de la comunidad, en el entorno de los 25 grados.

Galicia amanece en una situación intermedia entre la baja térmica que se cierne sobre la península y el anticiclón al noroeste con el aire cálido en superficie. Es por ello que los cielos estarán poco nublados o despejados en general. Aunque en viento del nordés soplará bastante fuerte en la mitad norte.

Debido a ello las temperaturas nocturnas serán muy inferiores, por debajo de los 20 grados en toda la comunidad, a excepción de Ourense, que no bajará de los 21.

La jornada del martes se repetirá la historia. Galicia se encontrará mañana en medio de esa bajada térmica y del anticiclón, con el cielo poco nublado y algunas nieblas en la zona costera durante la mañana y también a última hora de la noche. Los termómetros no sufrirán especiales cambios, de tal manera que la máxima volverá a darse en la ciudad de Ourense, con unos 39 grados, y la zona de Santiago seguirá en el entorno de los 33, siendo Vigo la que registre menos calor: 26 grados.

Habrá que esperar al miércoles –lamentablemente para los incendios que asolan nuestra comunidad– para que el anticiclón se aleje. Será entonces cuando Galicia quede en un área de bajas presiones que traerá consigo aire frío en altura. A esto se sumarán nuevamente las nieblas en el litoral atlántico y un cielo parcialmente nuboso en todo el territorio. La combinación perfecta, como bien sabemos los gallegos, para la llegada de las primeras lluvias del mes. Serán más probables a partir del mediodía y tendrán carácter tormentoso.

Eso sí, lluvia y frío no siempre van de la mano y las temperaturas no caerán sobremanera a mediados de la semana a pesar de las inclemencias del tiempo. Así, para el miércoles se espera que Ourense alcance los 37 grados, Santiago los 32 y Ferrol y Lugo incluso subirán hasta los 30, algo que no sucedería ni en estos días de calor y cielos despejados.

Pero para hablar de precipitaciones contundentes como tal que afecten al conjunto de la comunidad habrá todavía que esperar a la jornada del jueves. A partir de ahí, según el avance a siete días vista que concede Meteogalicia, tanto el viernes, como el sábado, el domingo e incluso el lunes, llovería de forma consecutiva (habrá que ver si intensa).

Esto supondría, en caso de no lograrse antes la extinción de los fuegos, un alivio para las labores de extinción, que llevarían ya una semana consecutiva luchando contra las llamas en circunstancias de calor muy difíciles. La lluvia podría ser suficiente para apagar los incendios, pero se necesita que sea abundante y persistente.

Porque lluvia como tal ya se registró en la madrugada del sábado al domingo, unas cuantas gotas que llegaron a mojar las carreteras en algunos puntos de la comarca del Barbanza –por ejemplo, en Ribeira se registraron 0,3 litros por metro cuadrado–, pero no fue suficiente ni siquiera para contener el avance de las voraces llamas.

Ahora bien, si tus planes eran ir a la playa a final de semana, te recomendamos que los adelantes y aproveches este lunes y martes.