El periodismo nos permite formar parte de la historia de la humanidad
Gabriel García Márquez decía que “el periodismo es el mejor oficio del mundo”. A día de hoy, es fácil olvidar esta máxima cuando sales de la universidad llena de ilusión y te das de frente con la realidad del mercado laboral y sus condiciones. Creo que nada en la vida es casualidad, que cuando atraviesas una mala racha no debes torturarte, porque algo bueno vendrá después. Y ese algo fue mi llegada a EL CORREO GALLEGO. Significó un punto de inflexión en mi carrera profesional, un reaprender a amar mi oficio y pasión: contar historias. A comienzos de año recibí una llamada del director para ofrecerme la posibilidad de realizar una serie de entrevistas. Todavía recuerdo mi sorpresa y la alegría que me invadió al saber que mi nombre volvería a aparecer en un periódico, junto a la satisfacción personal que conlleva el trabajo bien hecho. Astronomía, medicina, filosofía... Aprendía algo nuevo cada día, tiempo bien aprovechado en manos de expertos. Llegué a interesarme tanto que la extensión del papel se me quedaba corta, así que, decidí acuñar mi propia ‘fórmula’, como así la nombró el director: una versión corta para papel y una extensa para la web.
Inmersa en este trabajo, llegó el fantasma de las elecciones, algo que nunca se materializó debido al estallido de la pandemia del covid-19, que nos cambió todos los planes. Ya en plantilla, me puse a trabajar intensamente en la elaboración de reportajes y entrevistas de temática científico-médica, en un tiempo de gran incertidumbre donde informar a la población era oro. “La prisa y el espacio han minimizado el reportaje, género estrella”, decía García Mázquez, que, de ver nuestra labor ante esta crisis, estaría realmente orgulloso. Sin duda, yo puedo decir que lo estoy, ya que todos nos hemos dedicado en cuerpo y alma a la cobertura de esta inesperada enfermedad, tratando de ofrecer nuevas visiones y descubrimientos a la población, esencia de nuestro trabajo.
Por todo ello, puedo decir que, pese a llevar poco tiempo en esta casa, he tenido la suerte de entrar en el lugar indicado en el momento oportuno, un momento histórico. Este medio me ha permitido conocer a gente maravillosa y aprender que, cuando trabajas con un buen equipo, incluso las cosas más difíciles se vuelven fáciles.