Solo quedan dos fuegos activos en Galicia: Laza-Chandrexa y O Irixo

No hubo avances en la superficie quemada durante esta madrugada
Incendios forestales
Ángela Precedo
Vecinos de la localidad pontevedresa de Bustelo evacuados durante la noche del miércoles a causa de la cercanía a sus viviendas del fuego de O Irixo. Foto: Brais Lorenzo / Efe

Las temperaturas han bajado estos días de forma muy notable durante la noche. Por debajo de los veinte grados, incluso se acompañan de lluvias débiles en gran parte del sureste de la comunidad. Una combinación que, con todo, no es suficiente para parar la ola de incendios, que se ha mostrado más contenida, eso sí, a lo largo de esta madrugada, sin avances en ninguno de los fuegos que todavía asolan Galicia.

El más grande de ellos, el declarado en la parroquia de Camba, en el ayuntamiento ourensano de Laza, se mantuvo a lo largo de esta noche en las 2.100 hectáreas calcinadas. Cabe recordar que este incendio parte de dos focos que se cruzaron y dieron lugar a un fuego más grande: el de Laza como tal y el que se había declarado en la parroquia de Queixa, en el municipio vecino de Chandrexa de Queixa.

Desde la Consellería de Medio Rural afirman que en estos momentos las llamas ya se encuentran prácticamente perimetradas, por lo que se evoluciona favorablemente hacia su estabilización. Un técnico, 39 agentes, 68 brigadas, 41 motobombas, tres palas, una unidad técnica de apoyo, un tractor, doce aviones y catorce helicópteros trabajan en la zona.

Tampoco el fuego que cruza la parroquia de San Cosmede de Cusanca, en el municipio de O Irixo, hasta la de Astureses, en Boborás, tuvo avances durante la noche, manteniéndose en un total de 800 hectáreas arrasadas. Eso sí, el foco de Boborás, que afecta por su parte a 120 hectáreas, logró estabilizarse a las nueve y media de la noche del jueves. Mientras que en O Irixo el foco está prácticamente perimetrado, según Medio Rural, y avanza también hacia su estabilización.

Dos técnicos, 27 agentes, 72 brigadas, 51 motobombas, cuatro palas, una unidad técnica de apoyo, diez aviones y trece helicópteros trabajan en la zona de O Irixo. Mientras que en la de Boborás lo hacen dos técnicos, quince agentes, 26 brigadas, 21 motobombas, dos palas, cinco aviones y seis helicópteros.

Estos dos fuegos ourensanos son los dos únicos incendios que permanecen activos como tal en la comunidad.

EXTINGUIDO VILARIÑO DE CONSO Y CONTROLADOS LOS FOCOS DE SAN XOÁN DE RÍO Y CARBALLEDA DE VALDEORRAS. Sin salir de la provincia de Ourense, el otro foco importante, el de la parroquia de Casaio, en el ayuntamiento de Carballeda de Valdeorras, quedó controlado a las ocho y media de la tarde del jueves, en las 440 hectáreas. Un técnico, doce agentes, 36 brigadas, doce motobombas, dos palas, nueve aviones y ocho helicópteros luchan por extinguirlo.

Como extinguido quedó alrededor de las ocho menos cuarto de la tarde el incendio declarado en la aldea de Sabuguido, en el municipio de Vilariño de Conso. Tan solo arrasó con 0,21 hectáreas de superficie arbolada, pero afectó al Parque Natural do Invernadoiro, que ya había sido víctima de un gran incendio que calcinó (6.500 hectáreas) prácticamente toda su superficie a finales de julio. Un agentes, tres brigadas y tres motobombas fueron suficientes para apagar este pequeño fuego.

Asimismo, a estos focos, dentro de la provincia de Ourense, hay que sumar uno nuevo que se inició a las tres de la tarde del jueves, dándose por controlado a las dos de la madrugada, en la parroquia de Vilardá, en el ayuntamiento de San Xoán de Río. Alcanzó unas 20 hectáreas en poco tiempo y ahora permanece bajo la vigilancia de cuatro agentes, doce brigadas, siete motobombas y tres helicópteros.

ADIÓS A LA PESADILLA EN A CORUÑA: APAGADO AS PONTES Y CONTROLADO BOIRO. Pasando ya a A Coruña, todo son buenas noticias. El incendio que afectaba al municipio de As Pontes de García Rodríguez quedó extinguido sobre las dos de la madrugada del jueves al viernes. Acabó con 109,3 hectáreas, de las cuáles 49 eran arboladas y 60,3 eran monte raso. Cuatro técnicos, 22 agentes, 43 brigadas, 24 motobombas, tres palas, una unidad técnica de apoyo y dos helicópteros lograron terminar con este fuego.

Y el gran incendio declarado en la parroquia de Cures, en el ayuntamiento de Boiro, que había saltado hasta Ribeira, pasando por A Pobra y Porto do Son, logró controlarse a las ocho de la tarde del jueves, en las 2.200 hectáreas. Lleva días sin avances y diez técnicos, 109 agentes, 190 brigadas, 103 motobombas, trece palas, cinco unidades técnicas de apoyo, quince aviones y doce helicópteros luchan por apagarlo, aún sin éxito, pero cada vez más cerca de lograrlo.