Estas subvenciones de la Política Agraria Común rozaron los veintisiete millones en 2020 sólo en el entorno compostelano // Alcanzan a las explotaciones con vacas, cabras u ovejas, pero también al cultivo de forraje proteico y apicultura TEXTO M.M.

Ayudas europeas para cuatro mil granjeros de la comarca

Ayudas
Marcos Manteiga
La edil María Pose, primera por la izquierda, con Gonzalo Trenor, segundo, y personal de la granja Domínguez Porteiro de Santa Comba. Foto: X.G.

Gonzalo Trenor, delegado de la Xunta en A Coruña, comprobó ayer en Santa Comba los beneficios de las ayudas de la Política Agraria Común, que ejemplificó con uno de los perceptores: la Ganadería Domínguez Porteiro, dedicada al vacuno de leche. Además, informó que tan sólo en el Área de Santiago las subvenciones de la PAC (orden que incluye tanto los pagos directos a la agricultura y a la ganadería como las ayudas ligadas al desarrollo rural) alcanzaron durante el 2020 a más de 3.900 titulares de explotaciones y granjas, con una inversión de alrededor de 26,7 millones de euros.

El representante del Gobierno autonómico destacó que “para as zonas rurais, estas axudas son as máis importantes tanto polo número de beneficiarios como polo importe concedido, e son básicas na aposta da Xunta por fomentar a competitividade da agricultura galega, para que o rural sexa sinónimo de emprendemento e xuventude e non de estancamento”. Y es que, a nivel provincial, fueron 8.355 agricultores y ganaderos coruñeses que percibieron más de 53 millones de euros de esta orden con dos líneas de ayudas.

Las subvenciones de la PAC están vinculadas a la superficie destinada a cultivos proteicos para la alimentación animal o a la producción de legumbres de calidad. También se destinan a las explotaciones que mantengan vacas nodrizas, vacuno de cebo o vacuno de leche, así como a las de ovino y caprino.

Dicha línea de ayudas también tiene en cuenta los cultivos en zonas de montaña y otras áreas con limitaciones naturales para la actividad agraria, así como las explotaciones de animales de razas autóctonas en peligro de extinción; la apicultura como medio de conservación de la diversidad; la gestión sostenible de pastos; la extensificación de vacuno de leche y la producción de agricultura ecológica.

Destacar que estas aportaciones, que gestiona el Fondo Galego de Garantía Agraria (Fogga), son de “gran interese” para el sector primario, ya que contribuyen a reducir las diferencias entre la renta agraria y la urbana. De este modo, persiguen compensar a los agricultores y ganaderos por su prestación de servicios esenciales, con el objetivo de que puedan competir con otros países al tiempo que atienden a las exigencias específicas de los consumidores.

El Diario Oficial de Galicia (DOG) publicó el 29 de enero la nueva orden de la Consellería de Medio Rural de las ayudas de la PAC para este año. Los ganaderos y agricultores gallegos podrán presentar la solicitud única hasta el 30 de abril, accediendo directamente con un certificado digital a la aplicación informática SGA o acudiendo a las distintas entidades colaboradoras.

El presupuesto previsto para esta convocatoria se eleva a los 205 millones de euros, de los cuales 170 millones se corresponden con los pagos directos de la PAC y 35 millones de euros con las medidas de desarrollo rural (ayudas a zonas con limitación naturales, agroambiente y clima, agricultura ecológica y para el mantenimiento de plantaciones forestales en tierras no agrícolas). Se prevé que unos 26.000 agricultores y ganaderos soliciten estas aportaciones que potencian a los agricultores realmente activos y prácticas agrícolas beneficiosas para el clima.