Localizan en Cee una botija de media arroba del siglo dieciséis

Fue localizada por los marineros del pesquero ‘Tadima’ al levantar el aparejo // Podría ser de un buque de la Armada, segun Patrimonio
Patrimonio subacuático
Manuel Lavandeira
Botida de media arroba localizada por un pesquero. Foto: Guardia Civil

La Patrulla del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil de Corcubión recuperó en Cee una botija de media arroba que, inicialmente, se considera que pudo haber pertenecido a alguno de los barcos hundidos de la Armada en aguas de la ría de Corcubión a finales del siglo XVI.

Los efectivos de la mencionada unidad recibieron la llamada del patrón del pesquero Tadima advirtiéndoles de que en el aparejo de pesca que habían largado localizaron una vasija “de apariencia antigua”, la cual izaron a bordo. La Guardia Civil le solicitó al comunicante que la fotografiase para su remisión a la Dirección Xeral de Patrimonio Cultural de la Xunta.

Tras el envío de las imágenes tomadas por los responsables del pesquero, los técnicos de Patrimonio la identificaron como una botija de media arroba, estimando que podría formar parte de alguno de los buques de la Armada o de los barcos de Armada de Intervención en Irlanda hundidos en la ría de Corcubión en el año 1956.

La Guardia Civil se hizo cargo de la mencionada pieza para proceder a su custodia hasta le entrega a la Dirección Xeral de Patrimonio.

El investigador y estudioso de los naufragios acaecidos en Costa da Morte, Rafael Lema, señaló al respecto que “hai que coñecer en qué punto exacto se produxo o achádego, senón é difícil de atribuirlle a pertenza a algún buque da coñecida como Armada de Padilla”.

A este respecto, señala que “o único pecio que está confirmado que pertencía a esa frota é o Jerónimo, que se atopa na zona do cabo Cee (Corcubión), polo que si se atopou nesa zona, sí podería pertencer a este buque”.

Rafael Lema asegura que se trata de “pezas de uso común” y que incluso podría ser elaborada en Buño, “pois os oleiros desta vila traballaban moito para a Armada. E non só mercaban aquí utensilios de barro, senón que está documentado que as expedicións militares, e tamén outras, no século XVI abastecíase con cereal de Bergantiños”.