rumorosos

¿A punto de caramelo?

Firmas
Alberto Vidal

crisis Al presidente del Gobierno Pedro Sánchez le gusta la carne al punto. Así se lo espetó esta semana al ministro de Consumo, Alberto Garzón, por cuestionar con una campaña la ingesta de este producto porque el ganado genera a la atmósfera altas dosis de dióxido de carbono. El reproche de Sánchez a Garzón va en la línea de que parece que confunde los papeles y habla más como si fuera un representante de un colectivo ecologista o un organismo internacional encargado de hacer ese tipo recomendaciones que como un ministro con responsabilidades ejecutivas.

La salida de tono del titular del departamento de Consumo aumenta el ruido que venía escuchándose sobre una inminente crisis de Gobierno por parte de Pedro Sánchez. Con el acuerdo de Gobierno rubricado entre el PSOE y Unidas Podemos la negociación pasa ahora por las conversaciones entre el propio Sánchez y la vicepresidenta y ministra de Trabajo, la ferrolana Yolanda Díaz.

Cualquier intento de reducir el Gabinete, como apuntan algunas voces socialistas, chocaría con el rechazo de sus socios de Unidas Podemos, que este mismo viernes hicieron público su posicionamiento al respecto.

Sea como fuere y cuando fuere el cambio de caras (antes del comienzo de las vacaciones de verano o después cuando se inicie el nuevo curso político) Sánchez y Díaz tienen las claves para afrontar ese proceso. Ambos son corredores de fondo y conocen los resortes negociadores. Es más, el Gobierno se sostiene en base a esas habilidades para recabar apoyos varios. Aún así, con Alberto Garzón quemado, ¿no está más a punto de caramelo la remodelación? alberto vidal