Rechazada la propuesta de PP y Vox de prohibir por ley la concesión de los indultos para la sedición

Socialistas y soberanistas justifican en el Congreso que dicho delito no resulta más grave que un asesinato
'Procés'
Mario Álvarez
Los diputados de ERC Carolina Telechea y Gabriel Rufián, durante el pleno celebrado por la tarde en el Congreso. Foto: A. Ortega/E.P.

Madrid. El PSOE y Unidas Podemos, con el apoyo de sus aliados de investidura, rechazaron ayer en el pleno del Congreso tomar en consideración las propuestas del PP y de Vox de prohibir por ley la concesión de indultos en casos de condenas por sedición y rebelión.

El Partido Popular defendió una proposición de ley de reforma de la de indultos de 1870 para prohibir expresamente la medida de gracia en casos como los presos del proceso independentista de 2017.

Es una iniciativa que se registró en septiembre del año pasado, cuando el Gobierno central anunció que iba a comenzar la tramitación de las solicitudes de indulto, y que se debatió horas después de que el Ejecutivo aprobara el perdón para los nueve presos.

Por su parte, Vox presentó una Ley de protección integral de los denunciantes de corrupción que, además de premiar a éstos con un porcentaje del dinero que el Estado llegue a recuperar, incluía cambiar la Ley de Indultos para prohibir este perdón en casos de sedición, e incluso una reforma del Código Penal para castigar con entre tres y cinco años de cárcel la convocatoria de referendos que no hayan sido autorizados.

Hace una semana ya hubo una primera votación en la Cámara Baja sobre los indultos a los presos del procés, en la que 190 diputados de PSOE, Unidas Podemos y los socios del Gobierno (en torno al 55 % de toda la Cámara) desestimaron la pretensión del PP, Vox y Ciudadanos de rechazar la medida de gracia.

La reforma legal de los populares, defendida por el diputado Carlos Rojas, sumó el apoyo de Foro Asturias, UPN, Ciudadanos y Vox.

Para Edmundo Bal, de la formación naranja, la aprobación de los indultos marca “un día de luto, aciago para España, en el que el Consejo de Ministros ha puesto al país de rodillas frente a quienes trataron de romper España” y “humilla” a quienes se opusieron a aquel referéndum ilegal del 1 de octubre de 2017.

Desde Vox, el diputado Juan José Aizcorbé apoyó la reforma, aunque criticando a los populares porque, con el Gobierno de Mariano Rajoy, España sufrió dos referendos ilegales (la consulta del 9N de 2014 y el 1-O de 2017), se dejó que huyera uno de los “bufones” del independentismo (en alusión al expresidente Carles Puigdemont) y se aplicó un 155 “vergonzante”.

Enfrente se situó el PSOE. El secretario general del Grupo Socialista, Rafael Simancas, recordó que la Constitución contempla la posibilidad del indulto, y dijo no entender que el PP sólo los prohíba para el delito de sedición y no para el asesinato. “No al indulto a los presos del procés, pero sí el asesinato o incluso a (María Dolores) Cospedal si la condenan”, ironizó.

El presidente del grupo de Unidas Podemos, Jaume Asens, criticó la reforma del PP e incidió en los casos de corrupción que les afectan, denunciando que “el partido más corrupto de Europa era quien más indultaba”.

La prohibición por sedición concitó además el rechazo de ERC, cuya portavoz adjunta Carolina Telechea, no ve normal que ése sea un delito inindultable. E.p.