Vox exigirá derogar la ley de violencia machista para un Gobierno de coalición

Elecciones castellanoleonesas
Mario Álvarez
El candidato de Vox, García-Gallardo, en rueda de prensa. Foto: Claudia Alba/E.P.

El candidato de Vox a la presidencia de la Junta de Castilla y León, Juan García-Gallardo, afirmó este lunes que “de manera rotunda” los resultados electorales en esta comunidad indican que su partido tiene “el derecho y la obligación de integrar el Gobierno de Castilla y León”, y anunció que pedirá la derogación de la normativa autonómica contra la violencia de género y sobre memoria histórica.

“Ni más ni menos que otros partidos”, expresó García-Gallardo en una comparecencia ante los medios sobre la que informa Efe y en la que reivindicó un “cambio de rumbo” en Castilla y León, y recordó que en la anterior legislatura Ciudadanos accedió al Gobierno -con una vicepresidencia y tres consejerías- con un resultado inferior al suyo.

Sobre sus exigencias en la negociación que espera con el PP, anunció que dos de las exigencias que planteará en la negociación será derogar “en el minuto uno” normativas “de izquierdas”, como la ley autonómica contra la violencia de género y el decreto sobre Memoria Histórica en la comunidad.

Descartó hablar en este momento de acuerdos sobre cargos pero lo hará sobre los programas, con alusiones a la fiscalidad, la política de natalidad y a las reivindicaciones de las plataformas de la España Vaciada que entiende legítimas.

“Vox solo va a integrar un Gobierno para cambiar el rumbo de Castilla y León”, dijo en varias ocasiones García-Gallardo, quien quiso dejar claro así que cualquier negociación pasará por hablar de “derogar toda la legislación de izquierdas”.

Insistió en el mensaje lanzado por el líder nacional de Vox, Santiago Abascal, y dijo que va a hacer lo que han prometido desde el principio de la campaña, que es “usar los votos de estos 200.000 votantes para cambiar el rumbo en Castilla y León”.

En este sentido, afirmó que están “abiertos” a negociar con el PP, aunque lamentó que Alfonso Fernández Mañueco aún no le hubiera llamado y hubiera preferido hablar antes con el PSOE, a la vez que advirtió de que no conversarán con la dirección nacional de los populares al entender que las conversaciones deben ser entre líderes autonómicos.

Ante la posibilidad de que el PP negocie una abstención con el PSOE para facilitar la investidura de Fernández Mañueco, afirmó que el partido de Pablo Casado tiene que actuar con responsabilidad y le avisó de que si llega a un acuerdo con los socialistas “tendrá que asumir las consecuencias de una decisión de esa índole”, que es “lo que la base social del PP no quiere”.

Recalcó que llevarán la negociación “con firmeza” haciendo valer los votos que han obtenido pero también con “flexibilidad”, conscientes de que únicamente tienen el 17,6 % de la representación y no pueden “imponer” todo su programa ni “ocupar todos los puestos de nuestro Gobierno”.

“Puede que el PP esté atado de pies y manos, pero mi deseo es que en Castilla y León nos entendamos entre nosotros y yo voy a dirigir las negociaciones con el señor Mañueco porque somos los que tendremos que gobernar esta comunidad”, afirmó el candidato de Vox, que no quiso hablar de líneas rojas y subrayó que van a negociar “con responsabilidad, prudencia y flexibilidad”, forzando la salida de todas las políticas de izquierdas de la autonomía.

Insistió en que no se van a abstener para facilitar la investidura de Mañueco y de que no van a regalar sus votos a los populares porque “no han venido a ser la muleta de nadie”.

Advertencia de Egea sobre un posible bloqueo. El secretario general del PP, Teodoro García Egea, defendió un Gobierno del PP con “apoyos puntuales” de otras fuerzas políticas de las Cortes de Castilla y León para “sacar adelante medidas importantes”. Dicho esto, advirtió a Vox de que si “bloquea” el mandato de Mañueco tendrá que “responder de sus actos”.

Así se pronunció en varias entrevistas en Onda Cero, Telecinco y Antena 3 recogidas por Europa Press, en las que afirmó que Mañueco tiene mayoría suficiente para “explorar un Gobierno con posibles apoyos puntuales”, algo que ya practica el PP en varios ayuntamientos, dijo.