“Los gestores fuimos el segundo colectivo con más trabajo tras los sanitarios en la crisis covid”

Entre el 13 de marzo y el 1 de junio se paralizó todo el procedimiento administrativo y se acumuló en el verano
Ángela Precedo
economía. Aunque las oficinas han trabajado con cita previa y atención reducida, se han mantenido abiertas. Foto: Commons

“Los gestores hemos sido el segundo colectivo con más carga de trabajo durante esta crisis, después de los sanitarios nos tocó a nosotros”, asegura la vicepresidenta del Colegio Oficial de Gestores Administrativos de Galicia (GadeGalicia), Rosa López Río, que explicó que, “en un momento en que los Ministerios estaban paralizados, nosotros tuvimos que hacer de intermediarios entre la Administración y los administrados”.

Para ellos la lucha contra el covid desde el punto de vista administrativo también se volvió una verdadera pesadilla. “Te puedes imaginar qué supuso para nosotros el que en un momento en que salen los préstamos ICO, las subvenciones y las ayudas de la prestación por cese de actividad de los autónomos, nosotros tenemos que tramitar todo lo de los ciudadanos y empresas”, advierte Rosa, que incide en que por esta razón, “desde marzo hasta ahora, evidentemente, nuestro trabajo se ha multiplicado y dificultado”.

A la sobrecarga de trabajo que se acumuló sobre el ya existente, se sumó la sobrecarga a nivel psicológico, por “trabajar en situación de mucha inseguridad”. En este sentido, Rosa apunta que “no nos daba tiempo a informarnos”. “Tú, normalmente, cuando sale una norma, la lees y la relees e intercambias opiniones con los compañeros, es decir, la estudias bien para ver sus ‘peros’, sus ‘pros’ y sus ‘contras’ antes de tener que asesorar a un cliente sobre ella”, explica la vicepresidenta del Colegio Oficial de Gestores Administrativos de Galicia.

ESTUDIAR SOBRE LA MARCHA. Sin embargo, desde marzo hasta mediados de julio, “todo era aquí te pillo aquí te mato”, o sea, “hoy salía la ley y mañana ya había que aplicarla, así que tuvimos mucha inseguridad en ese aspecto”. Con todo, aplaude “la flexibilidad de la Administración, poniendo mucho de su parte y siendo comprensivos”. Y es que no había más remedio que arrimar el codo, pues Hacienda no dejó nada para otro momento. Así, Rosa incide en que “el vencimiento del primer trimestre se realizó en el mes de abril y Hacienda no alteró las fechas para presentar las declaraciones de la renta que debían realizarse entre mayo y junio; aunque sí aplazó sus pagos, las declaraciones hubo que presentarlas igual”.

Asimismo, al igual que sucedió en el caso del colectivo médico, los gestores actuaron también como psicólogos de sus clientes. “Tenían muchas dudas, estaban muy preocupados por la evolución de la situación y, dentro de nuestro trabajo, además de proporcionarle soluciones, estaba animarles y quitarles de dudas, lo que también supuso para nosotros un esfuerzo importante”.

INSEGURIDAD DE LOS EMPRESARIOS. “Las empresas tenían en principio, y aún a día de hoy, mucha inseguridad, porque desconocían qué podían hacer y qué no con sus trabajadores, pues estaban saliendo reales decretos casi a diario, incluso algún día a las 23.00 horas de la noche”, recuerda Rosa, que añade que fue un suplicio “informarlas a todas de una actualidad cambiante cada 15 días respecto a normas, ERTEs, condiciones...”.

Como gestorías, tuvieron que tramitar el desempleo de todos los trabajadores en ERTE de sus empresas clientes. “Ese era un tema que antes los trabajadores hacían personalmente, desplazándose a las oficinas del SEPE para tramitar su cobro por desempleo, pero al estar cerradas, tuvimos que tramitarlas nosotros en representación de las empresas”, indica la vicepresidenta del GadeGalicia.