Portugal, saturado, ya sopesa pedir ayuda y enviar pacientes del Norte al hospital de Vigo

Batió ayer el récord de fallecidos, con 291 y superando los 11.000
Alberto Vidal
Una doctora atiende a un paciente con coronavius en una unidad de cuidados intensivos del Hospital Universitario de São João, en la ciudad de Oporto Foto: Rita F./E.P.

Tan difícil es su situación interna que Portugal está atravesando por la pandemia que la administración lusa calibra ya pedir ayuda internacional.

El Gobierno portugués sopesa enviar pacientes COVID a hospitales fronterizos de España. Los pacientes del Norte luso se trasladarían al Álvaro Cunqueiro, de Vigo; y a medida que se vaya bajando en la zona fronteriza, los enfermos lusos serían trasladaos a centros de Zamora, Badajoz o Sevilla, siempre según fuentes del ámbito sanitario, aunque no del Gobierno.

La revelación solo de carácter genérico, sin especificar ni países ni hospitales, fue realizada por la ministra de Salud lusa, Marta Temido, en una entrevista en la cadena pública RTP la noche del lunes, en la que afirmó que “el Gobierno portugués está accionando todos los mecanismos de los que dispone, principalmente en el cuadro internacional, para garantizar que da la mejor asistencia”.

Cuestionada sobre si el Ejecutivo del socialista António Costa se plantea “pedir ayuda internacional, ayuda europea, para enviar pacientes” a otros países, la ministra respondió que Portugal, al estar en el extremo más occidental de Europa, tiene claras dificultades geográficas, pero la cuestión se estudia.

“Estamos en un extremo de la península y, por lo tanto, con mayores dificultades geográficas, pero de cualquier forma, hay mecanismos y formas de obtener auxilio y de ajustar formas de colaboración, y naturalmente que las estamos sopesando”, manifestó la ministra.

No obstante, Temido subrayó que se debe tener en cuenta “que toda la situación europea es preocupante”.

Portugal está siendo duramente golpeado por la tercera ola de la pandemia entre otras cosas por la presencia de la variante británica, que tiene ya una prevalencia del 20 por ciento.

La semana pasada fue la peor del país desde que comenzó la pandemia con récord diario de fallecidos hasta las 275 muertes registradas este domingo, pese a que ayer mismo ya se superó esa cifra.

De hecho, las autoridades sanitarias notificaron ayer martes un nuevo récord de fallecidos en 24 horas, un total de 291, lo que eleva el recuento provisional de víctimas mortales por encima ya de las 11.000 tras el reciente pico de contagios.

En concreto, 11.012 enfermos perdieron la vida en territorio luso, según la Dirección General de Salud, que tiene registrados también 653.878 casos, 10.765 más que en el balance divulgado el lunes. Unos 6.500 pacientes están ingresados en hospitales, de los cuales 765 en unidades de cuidados intensivos.

Por regiones, Lisboa y Valle del Tajo se mantiene como la zona más afectada por esta nueva ola, al sumar 5.785 nuevos casos en un día, por encima de las registradas en la parte Norte, que añade 2.893 positivos a su balance particular, y del Centro, que concentra otros 1.407.

Portugal tiene a 200 municipios en riesgo extremo por la prevalencia del virus, que obligó a prorrogar sucesivamente un estado de emergencia que ya se está negociando de nuevo para obtener una nueva ampliación. El texto deberá ser sometido de nuevo a debate en la Asamblea de la República. El presidente, Marcelo Rebelo de Sousa, aseguró ayer que “tiene todo el sentido” prorrogarlo, según la cadena de televisión RTP.