Ya está en obras y prevé inaugurarlo en agosto // Ocupa 160 m2 y pretende que sea un local de cocina tradicional // La decoración será sencilla // Está en el puerto // Salieron a la luz las losas de piedra de la antigua planta de salazón TEXTO Suso Souto

Chipperfield abrirá este verano un bar-restaurante en Corrubedo

Suso Souto
A PIE DE PLAYA. Fachada del edificio en cuyo bajo estará el local, al pie de la playa de A Robeira. Foto: S. Souto

Las escapadas del prestigioso arquitecto británico David Chipperfield a la localidad ribeirense de Corrubedo (donde veranea desde hace décadas y donde adquirió varias casas) son cada vez más frecuentes y, sus estancias, cada vez más prolongadas. Y, después de haberse implicado con el municipio creando la Fundación RIA o instalando una escultura del artista Gormley a orillas de la playa de As Furnas, ahora avanza en su compromiso con Ribeira para abrir allí un establecimiento hostelero.

Y será, como no podía ser de otra manera, en Corrubedo. Concretamente en el puerto. A través de su empresa David Chipperfield Architects ha alquilado la planta baja del inmueble situado en el número 4 de la zona portuaria, frente a la playa de A Robeira (al lado del bar Pequeño).

Se trata de un local de aproximadamente 160 metros cuadrados, que pretende convertir en un bar-restaurante en el que se ofrezca cocina tradicional gallega. La decoración será sencilla porque quiere que sea un establecimiento “como los de toda la vida”, según comenta la arquitecta a la que encomendó el proyecto, Sofía Blanco Santos.

Y, de hecho, Chipperfield se refiere a este negocio como “la reapertura de un bar que cerró hace años”. Añade que “la idea es que sea un bar local para el pueblo de Corrubedo, más que un restaurante” y que tendrá cocinero gallego.

Las obras ya están en marcha desde principios de este mes. Estaba previsto iniciarlas ya en marzo, pero el decreto del estado de alarma retrasó el comienzo de los trabajos, que lleva a cabo una empresa de la zona: Construcciones y Reformas Francisco Brión, de Olveira.

En las primeras tareas, en las que se han saneado los muros, ha saltado una sorpresa: salieron a la luz las losas de piedra (de cincuenta por treinta centímetros) de la antigua planta de salazón que hubo en ese lugar. El local pertenece a Isolino Brión, quien indica que antiguamente hubo allí una planta de salazón y que, con posterioridad, se construyó la casa en su lugar.

Su padre, Isolino, regentó allí una pescadería durante unos meses. Pero el negocio no prosperó, y en los años setenta abrió un bar que regentó junto su esposa, María Santos. Se llamaba Bar O Porto y fue famoso por la exquisitez de las tapas que elaboraba la mujer. Estuvo abierto hasta el año 1992.

La entrada del futuro negocio hostelero ocupa unos sesenta metros cuadrados; la zona destinada a la cocina, unos diez; y la del bar, unos cincuenta. En la parte posterior cuenta con un almacén.

En principio, Chipperfield pretende que el establecimiento pueda abrir sus puertas ya este verano, en principio en agosto, aunque la fecha no es firme. Baraja varios nombres. Uno de ellos es O Bar do Porto.

En cuanto a Sofía Blanco Santos (Santiago, 1990) es licenciada en Arquitectura por la ETSAM de Madrid y Master por el Graduate School of Design de la Universidad de Harvard. En 2018 abrió su estudio en Galicia y, entre los proyectos que realizó en Barbanza figuran los apartamentos de verano en el camping de Coroso (Ribeira).

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