“Entrenar con pesas, la mejor terapia contra el envejecimiento”

Luis Pernas no es un recién llegado a la profesión. Para quien no lo conozca es propietario de la cadena de gimnasios privados más grande del Norte de España, compitió en ciclismo, en artes marciales y en fisicoculturismo. En esta última disciplina es “donde destaqué. Aunque ya estoy retirado, llegué a ser campeón del mundo, míster Universo, fui cinco veces campeón de España en peso pesado”.

No valen excusas (en general) porque sí se puede hacer deporte con mascarilla y no tener problemas, ¿verdad, Luis?

Así es. Lo que hay que bajar un poquito es el nivel de intensidad porque al final entras en un entrenamiento de hipoxia (déficit de oxígeno en un organismo), pero también te refuerza la capacidad pulmonar. Cuando nos dejen quitar la mascarilla, vamos a tener muy fortalecido el sistema pulmonar y estaremos mejor preparados que una persona sedentaria.

¿Propició el confinamiento la vida sedentaria?

Sí, porque hace un año no podíamos ni salir a correr a la calle. Y eso produjo más colesterol, más diabetes, más problemas cardiovasculares, más obesidad (que te mata más lentamente). Y todo eso se rebate haciendo deporte, pero tampoco echándose a correr sin dirección.

Imagino que es fundamental contar con un asesoramiento profesional para evitar lesiones. Montar un gimnasio en casa está bien cuando te han enseñado la técnica, pero si no, puede ser contraproducente para el cuerpo.

Cuando viene una persona a Wonder, lo primero que hace es un test sencillo y responde a unas cuestiones que nos permite conocer cuál es su estado físico. Pero también se le pregunta cuáles son sus objetivos, porque no todo el mundo va a un gimnasio para adelgazar, hay quien quiere engordar, y la mayor parte de la gente va para liberarse, para tener su momento de cuidarse. Al final, y está demostrado, el entrenamiento con pesas es la mejor terapia antienvejecimiento que existe, porque con la edad perdemos masa muscular, y lo importante es intentar tonificar. A partir de los 35-40 años se va perdiendo, y eso es lo que tenemos que intentar evitar.

¿Crees que el educador físico-deportivo debería estar considerado como un agente de salud más sobre todo cuando se trata de personas que, en un momento dado, sufren trastornos de ansiedad, depresión, estrés...? No olvidemos que la pandemia ha propiciado más consultas a los psicólogos y psiquiatras.

Te cuento que hice deporte toda mi vida y en junio hace 18 años que abrí mi primera instalación deportiva. Lo que vi es toda esta evolución es que cada vez hay más gente que hace deporte por un tema psicológico, bien por una ruptura en pareja, bien porque en el colegio se meten con una niña o un niño porque está un poquito gordo o, simplemente, por el estrés laboral.

Los sanitarios ahora mismo están con un estrés tremendo, llevan un año a tope; los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, igual. Fíjate que tuvieron que dedicarse a salir a la calle a perseguir ciudadanos, y eso les ha provocado una situación muy incomóda. La COVID-19 lo que ha hecho ha sido generar más estrés en la sociedad. Tú lo ves en una caravana, ahora los coches pitan más, los conductores son más ariscos. Todo esto, al final, con el deporte liberas esas malas sensaciones.

Yo competí por todo el mundo en diferentes disciplinas deportivas, y aunque me retiré en 2014, sigo entrenando porque me sienta bien. Y está demostrado que se segregan endorfinas, te relajas, vas a dormir mejor... El deporte te va a ayudar, pero tiene que ser guiado por unos profesionales. Hablando, por ejemplo, con el Colegio de Fisioterapeutas de Galicia, nunca tuvieron tanto trabajo como ahora porque la gente se echó a la calle a correr sin control o a hacer bicicleta sin haberlo hecho nunca, y eso ha provocado lesiones.

Apuntarse a un gimnasio es relativamente fácil (hay fechas señaladas en el calendario que todos conocemos), pero lograr una continuidad es complicado, conseguir la sensación de que el ejercicio sea placentero y no una obligación lleva un tiempo, ¿verdad? ¿Vais a conseguir motivar a vuestros clientes?

Como profesional al frente de instalaciones deportivas, todos mis trabajadores llevan una política de empresa muy clara: no preparamos atletas profesionales, sino a la gente de a pie. Lo que tenemos que conseguir es que esa hora de tiempo en el gimnasio sea su momento de felicidad en el día. Intentaremos que cumplan su objetivo y que el hecho de acudir a hacer deporte a Wonder sea parte fundamental en su vida, agradable, sin sufrir y que, sin darse cuenta lo disfruten. Si entran con un día malo, saldrán mejor. Para mí el objetivo ha de ser el de conseguir sonrisas en nuestros clientes. Para nosotros ese es el éxito.