‘Celos’ en el pleno por la alianza entre PSOE y PP para invertir 9,5 millones

Los dos partidos sacaron adelante en un pacto histórico un plan de obras y ayuda social // CA y BNG, críticos con el ‘acuerdo de la pandemia’
Carlos Deaño
Pleno municipal celebrado ayer, solo con los portavoces de los grupos en el salón del pazo de Raxoi. Foto: Concello

Socialistas y populares unieron ayer sus votos en la propuesta para destinar los nueve millones y medio de euros de los remanentes de tesorería de 2019 en ayudas sociales y proyectos de obra, aunque el apoyo del PP no estuvo exento de críticas.

El alcalde, Sánchez Bugallo, justificó por la premura de tiempo que la propuesta no se hubiera negociado más a fondo con la oposición, pero recordó que era necesario aprobar estos gastos antes del final del ejercicio. Con todo, recordó que en el documento figuraban varias de las propuestas aportadas por los otros tres grupos. En este sentido, no dudó en afirmar que “creo que os nosos veciños o necesitan, e creo que vostedes o cren tamén”.

El argumento fue suficiente para convencer al portavoz del PP, Alejandro Sánchez-Brunete, que aunque reconoció que no estaba totalmente de acuerdo con el reparto, y que quizás se podría haber ajustado más la inversión para hacerla más efectiva contra la crisis, lo importante era poner en marcha medidas que ayudaran a los sectores más damnificados por los efectos de la pandemia. “Entre la vocación del no a la actitud del alcalde en la negociación, nos vamos a quedar en el sí a que se apruebe esta importante inversión para ayudar a nuestros emprendedores que tanto la necesitan”, afirmó.

Compostela Aberta y BNG criticaron sin embargo la propuesta, cuestionando la inversión en obras que consideraron que no eran tan necesarias y previstas hace tiempo, por lo que el dinero podría destinarse a uso social.

Marta Lois, portavoz de CA reclamó “máis axudas directas, e menos chapapote e menos cemento”, criticando lo que calificó de “querencia do alcalde Sánchez Bugallo polo asfalto e o formigón”.

Para la representante del BNG, Goretti Sanmartín, sería necesario “crear unha oficiña municipal para axilizar a concesión de axudas”. Consideró positiva la cantidad que se va a destinar, “pero non coñecemos cales son as liñas polas que se vai guiar ese investimento”, dijo, para concluir que “aquí temos moita propaganda mediática, pero pouca transparencia”, y echó en falta que aún no se hayan presentado los presupuestos, “que sería o mellor regalo para os afectados”.

Pero lo que más dolió en ambos grupos fue el cambio de alianzas, y que Sánchez Bugallo optara por apoyarse en esta ocasión en los populares, incluso con alusiones a una posible proximidad con el gobierno autonómico y el grupo mayoritario de la oposición.

La cuestión es que los dieciocho votos que sumaban PSOE y PP y la abstención de los siete restantes concejales permitirán destinar tres millones y medio (a los que hay que sumar otro millón aportado por la Diputación de A Coruña) a líneas de apoyo a los sectores más damnificados por la pandemia y a programas para la recuperación económica.

Así, según explicó la concejala de Hacienda, Marta Abal, este dinero irá destinado fundamentalmente a tratar de paliar la situación de los sectores de hostelería, comercio y la cultura.

Concretamente, a “financiar os gastos correntes necesarios para o desenvolvemento das súas actividades. Prevese unha liña de 300.000 euros para o fomento do consumo no comercio e na hostalería, e unha liña de 400.000 euros para investimentos no sector da hostalería”. También se destinarán 600.000 euros al fomento de la actividad cultural en Santiago.

De esta forma, señaló, “en última instancia preténdese contribuír á adaptación da hostalería ás novas formas de vender para que no futuro se vexan afectadas o menos posible ante situacións como a que estamos vivindo”.

En la sesión, aunque también con polémica, y con los mismos votos, PSOE y PP a favor, y abstención de CA y BNG, salió adelante una modificación de crédito para hacer frente al desarrollo del Plan de Sostibilidade Turística, presentado el lunes.

En esta anualidad el Ayuntamiento destinará una partida de 200.000 euros, que se sumarán al millón que aporta el Gobierno central y los 800.000 de la Xunta. El resto, hasta los tres millones, llegarán en ejercicios sucesivos, ya que la vigencia es hasta 2023.

Las críticas de CA y BNG se centraron también en la ausencia de negociación, y en que, a su entender, el plan no prevé un cambio de modelo para conseguir la diversificación y la desestacionalización. El concejal de Turismo, Sindo Guinarte, explicó que lo que recoge el plan son cinco líneas de actuación, que ahora será preciso desarrollar. “Os eixos son os que vinculan o plan. As accións pódense modificar”, explicó.