Habrá Cabalgata de Reyes “pero iremos vendo como”, dice Bugallo

Después de un fin de semana de reflexión a la vista del revuelo organizado tras el anuncio de que no habría Cabalgata de Reyes este año en Santiago, el alcalde, Xosé Sanchez Bugallo, anunció ayer que había decidido rectificar la decisión inicial de suspenderla, y que sí tendrá lugar, aunque todavía no está claro cómo se va a desarrollar.

Uno de los factores fundamentales que había llevado a suspender todos los actos previstos sigue vigente todavía, y es el hecho de que la práctica totalidad de los menores de once años, el público mayoritario en estas celebraciones, está sin vacunar.

A ello se suman los “preocupantes” datos que arrojan muchos países europeos, como Gran Bretaña, o incluso socios de la UE, caso de Polonia, Rumanía o Letonia, entre los ejemplos que citó, recordando que el número de casos en ellos oscila entre los quinientos y los mil.

Así las cosas, aunque los datos en España son mucho mejores, “non sabemos o que pode traer” esta situación en otros países, algunos con variantes que entrañan un riesgo sanitario.

Pero por otro lado, explicó, también hay otro factor que es preciso tener en cuenta, como es la desescalada que se está produciendo en otros sectores, y que permite la realización de otras actividades lúdicas. En concreto, aludió al caso de las discotecas, donde se podrá cubrir el cien por cien del aforo.

Pliegos. Ante estas circunstancias, señaló que no parecía muy razonable que una fiesta en la que tanta ilusión tienen puesta los más pequeños no pudiera celebrarse, de forma que la decisión final después del período de reflexión fue que sí habrá cabalgata.

En breve se comenzarán a elaborar los pliegos para contratar la celebración, aunque va a ser difícil, porque reconoció que “haberá que estar moi pendientes” de la evolución de la situación, de forma que, como resumió muy gráficamente, “Cabalgata sí, pero iremos vendo”. Lo que está claro es que será en movimiento, “porque en caso contrario non sería desfile”.

Habrá que estudiar, pues, si será con máscara, o las fórmulas más adecuadas para garantizar que se establezca una distancia de seguridad entre los participantes, además de otras medidas de control que se vayan estableciendo de aquí a la fecha.

Eso si, en el caso de que en el tiempo que todavía resta hasta el próximo cinco de enero se produjera algún cambio importante en la evolución sanitaria que desaconsejara la convocatoria, no tendría ningún inconveniente en volver a rectificar y suspender la celebración, aunque ello supusiera la anulación del contrato y la correspondiente indemnización a la adjudicataria por ello.

De esta forma, al igual que en días pasados, se aprobó la inversión para instalar la iluminación navideña, y también se anunció una actuación musical para el día 31 con motivo de Fin de Año.

Esta decisión de suspender la Cabalgata, pero mantener el cotillón causó un hondo malestar, tanto dentro como fuera de Raxoi, por considerar que no estaba totalmente justificada, e invitaron al gobierno local a que reconsiderase la medida, como así ha sido, a la espera de que la situación sanitaria no obligue a adoptar demasiadas precauciones y la celebración tenga la vistosidad necesaria.