Homenaje a José González, fundador del Gonzaba

Hostelería
El Correo Gallego
José González, sentado en la cabecera, durante el homenaje que le rindieron en el local que ocupa el Gonzaba que él fundó en el año 1976 y que en la actualidad conserva su esencia bajo el nombre de la Casa da Coca, propiedad de Carlos Romero, segundo por la izquierda. Foto: J.T.

Dice el refrán que nunca es tarde cuando la dicha es buena. Y así es, tal y como quedó demostrado ayer en uno de los emblemáticos establecimientos hosteleros santiagueses. José González López recibió, a sus 89 años, un merecido homenaje en los que fueron sus dominios, en el local que hoy acoge la Casa da Coca y en el que antes se asentó el asador Gonzaba que él fundó con José Miguel Zabaleta en las galerías de la compostelana rúa Nova de Abaixo, 17. De ahí el nombre. De la fusión de sus apellidos: González Zabaleta. Y el local no perdió la esencia ya que todavía conserva su primer cartel luminoso y en una de las columnas la factura de dicho letrero cuando se instaló en 1976. José González se llevó una alegría ya que entre los asistentes estaban clientes de aquellas primeras épocas y otros más recientes además de su esposa, Eugenia Vázquez, y sus hijos, José Antonio y Benjamín. El homenaje fue posible gracias al empeño de Carlos Romero Ozores, el hostelero que ocupa ahora el local y que ya dirige un establecimiento con idéntico nombre, Casa da Coca, en Tomiño además de ser el propietario y fabricante de los hornos de brasa HBE. A unos entrantes fabulosos a base de montaditos de sardina ahumada, anchoa con queso y los champiñones del Gonzaba de toda la vida se sumaron unos mejillones a la brasa y unas gambas de Huelva exquisitas poniendo el broche de oro la carne, una de las grandes especialidades de la casa junto con su bacalao a la brasa y los pescados frescos. Los postres corrieron a cargo de la buena mano en la cocina de la esposa del homenajeado, que solo recibió elogios por su bizcocho y su tarta de almendra. Y para finalizar unas soberbias voces pusieron el punto musical a la comida. Tan agradable resultó la reunión que todos los asistentes están dispuestos a repetir cuanto antes. ¡¡Qué se prepare José González para otro homenaje por todo lo alto!!