Las familias solicitan que el carrusel abra un poco más temprano

Santiago. Uno de los elementos estrella de esta Navidad en Santiago está siendo, sin duda, el carrusel instalado en el Obradoiro. Como no podía ser de otra forma, los pequeños disfrutan montando en él, lo que llena de vida la emblemática plaza de la capital gallega. Con todo, dentro de esta primera semana de fiestas, una petición impera sobre el ambiente: la apertura más temprana del tiovivo.

En este sentido, la experiencia de las jornadas festivas de este pasado martes y jueves ha dejado claro a los progenitores que podrían pensar más en los niños a la hora de programar la apertura de esta actividad. En este sentido, teniendo en cuenta las gélidas noches de diciembre, así como, en este caso, las jornadas lectivas, entienden que se podría abrir mucho antes en la tarde. De este modo, para cualquier paseante de la zona vieja en estas fechas se puederesulta sencillo comprobar cómo, mientras se mantiene cerrado el carrusel, muchos menores rodean este espacio, esperando con ansia que encienda las luces y comience a funcionar.

En esta línea, entienden que, para aquellos días que hay colegio, las 17.30, hora de inicio, se ajusta a las necesidades de los escolares. Sin embargo, para las festividades o para el fin de semana, consideran que no resultaría necesario esperar hasta tan tarde, especialmente pensando en los más pequeños de la casa.

Así, en los últimos minutos antes del cierre, programado para las 20.30 horas, la densidad de los niños desciende considerablemente, lo que lleva a incidir más en las reclamaciones de los padres y madres.

En todo caso, más allá de ello, lo que sí que queda claro es que esta ornamentación ubicada en la plaza compostelana resulta todo un éxito, puesto que ayuda a iluminar y llenar de vida el entorno de la Catedral en estas fechas tan señaladas. Los caballitos son, sin duda, uno de los mayores atractivos dentro de esta época mágica. F.CERNADAS