Quince años después arranca al fin la construcción del enlace orbital

Mejorará no solo las conexiones de la ciudad, sino de toda Galicia, afirmaron Bugallo y Losada // Confían en que se pueda recortar el plazo de ejecución inicialmente previsto en treinta meses
Infraestructuras
Carlos Deaño
Plano de situación del orbital, trazado en color verde. Le sigue, en color rojo, el orbitaliño que enlaza con la N-550

El nuevo enlace orbital de Santiago permitirá todos los movimientos posibles entre la autopista y la la autovía de Lavacolla, mejorará la conexión con el aeropuerto y facilitará el acceso a los polígonos industriales aliviando el tráfico pesado que ahora circula por el periférico y la salida por San Lázaro de la AP-9.

Así resumieron ayer la utilidad de la nueva infraestructura tanto el alcalde, Sánchez Bugallo; como el delegado del Gobierno, Javier Losada; y el jefe de la obra, Ignacio Ardá; en el acto de colocación de la primera piedra que tuvo lugar ayer y marca el inicio de unos trabajos que se prevé finalizar en treinta meses.

Son casi tres años, pero poco tiempo comparado con el que hubo que esperar para que por fin se pusiera en marcha una obra que se comenzó a planificar hace quince años, con la elaboración del plan de accesos a la ciudad, y su diseño se completó en 2011 dentro del proyecto de la ampliación de la autopista, tal y como recordó el alcalde, destacando que “agora damos un paso máis”.

Ahora por fin se acomete, y en breve se espera que también lo haga su hermano pequeño, el orbitaliño, que estará situado más al norte, y permitirá enlazar con los polígonos industriales y a éstos con la carretera N-550, el polígono del Tambre y la variante de Aradas.

El plazo de ejecución de la obra es de treinta meses y corre a cargo de la UTE Francisco Gómez-Arias Irmáns-Taboada y Ramos, creada por tres empresas gallegas. Con todo, Javier Losada se mostró esperanzado en que en el transcurso de la obra se puedan acortar estos plazos previstos y finalizarla antes.

En su intervención, el alcalde calificó esta obra de “primordial” para la mejora de las conexiones en la ciudad, pero destacó también que los beneficios se extenderán más allá , ya que se mostró convencido de que “mellorarán notablemente” las comunicaciones de toda la comunidad, porque “ao final o norte e o sur trenzan nesta zona”. También destacó que se verán beneficiadas las conexiones con Lavacolla, “que move o 60 % do tráfico en Galicia”.

En esta misma línea se expresó el delegado del Gobierno en Galicia, Javier Losada, señalando que esta rotonda elevada se convertirá en “una pieza fundamental del rompecabezas que forma la Red de Carreteras del Estado en Galicia”, por su posición estratégica, y afirmó que con ella habrá “un antes y un después” en el desarrollo económico y urbano de la zona norte de la ciudad.

Por último, destacó el compromiso del Gobierno, y especialmente del ministro Ábalos con la ciudad, lo que había permitido que un proyecto como éste, tan demandado y con tanto tiempo de espera, se pudiera resolver en apenas un año de plazo.

En este sentido, recordó también que en breve empezará la obra de renovación del pavimento del periférico de Santiago, un proyecto que ya está adjudicado por más de doscientos mil euros.