Última gran oportunidad para atravesar la Puerta Santa, que se cerrará hasta 2027

Más de 600.000 peregrinos recibieron la compostela en lo que va de bienio jacobeo // Monseñor Barrio hace balance positivo de un jubileo que se ha caracterizado por “la alegría y la esperanza”
Arturo Reboyras
PEREGRINACIÓN DE LA SALLE. Alumnos y profesores del Colegio La Salle de Santiago peregrinaron este viernes a la Catedral, a la que accedieron a través de la Puerta Santa. Foto: La Salle

Quienes todavía no hayan ganado el jubileo y deseen hacerlo deben apresurarse, puesto que la Puerta Santa echará el cierre en tres semanas, el 31 de diciembre, y no volverá a abrirse hasta el mismo día de 2026, víspera del inicio del próximo Año Santo. Después de un bienio jacobeo marcado por la pandemia, Compostela se despide del Xacobeo más espectacular de su historia, al menos en lo que se refiere a llegada de peregrinos. Hasta el 8 de diciembre llegaron a Santiago 435.464 caminantes, a los que hay que sumar los 178.912 que alcanzaron la meta de la Ruta Jacobea en 2021, para así hacer balance de lo que va de Año Santo, que finalizará el 31 de este mes, con la ceremonia de clausura y el cierre de la Puerta Santa de la Catedral. Así, en total en lo que va de bienio jacobeo se han entregado 614.376 compostelas.

En este sentido, cabe recordar que el que despedimos ha sido un jubileo histórico en cuanto a cifras, puesto que pese al temor de que la pandemia pudiese influir a la hora de emprender la Ruta, sobre todo por los problemas de movilidad, lo cierto es que la peregrinación se ha recuperado muy rápido, tanto como la confianza de los peregrinos de los lugares más recónditos que a lo largo de este periodo han llegado a la tumba del Apóstol. Hay que señalar que desde la primavera y hasta bien entrado el otoño el contador de compostelas de la Oficina del peregrino no dio a basto, con una media de dos mil certificados entregados cada día. Además, también se ha podido percibir de nuevo la multiculturalidad propia del Camino, puesto que los extranjeros también han venido a venerar los restos del Amigo del Señor.

La Puerta Santa de la Catedral no tiene contador, pero se estima que entre peregrinos y visitantes este bienio ha podido ser atravesada por incluso millones de personas. Quedan apenas tres semanas para que quienes todavía no lo hayan hecho puedan cumplir con este ritual, y a mayores ganar el jubileo, para lo que es necesario visitar la tumba del Apóstol, rezar por las intenciones del papa, que son las de la Iglesia romana, confesarse y participar en la eucaristía, en un plazo de hasta 15 días después acudir a Compostela.

MENSAJE DE CLAUSURA. Precisamente con motivo de la clausura del Año Santo, el arzobispo de Santiago, monseñor Julián Barrio, hizo pública ayer una carta pastoral en la que da “gracias a Dios al clausurar este Año Santo compostelano, que nos invita a mirar, por una parte, con gratitud el pasado, pero que nos abre con tanta esperanza al futuro”.

El prelado compostelano indica que este tiempo Jubilar “ha estado marcado durante la primera parte por la incertidumbre de la pandemia y en la segunda por una multitud extraordinaria de peregrinos que han venido en peregrinación hasta la tumba del Apóstol. La Iglesia en Santiago agradece a todos, en esta hora tan especial, el mantener viva la tradición de peregrinar a Santiago y el querer compartir con nosotros la celebración de este Año Santo que está llegando a su fin”.

El arzobispo también afirma que el Año Santo ha sido “una experiencia de gracia del que esperamos para nuestra Iglesia diocesana, y para toda la Iglesia en Galicia, España y el mundo, frutos abundantes de renovación personal y comunitaria que nos ayude a ejercer la fraternidad, avivar la esperanza, trabajar por la justicia e impulsarnos a llevar a todos la alegría del Evangelio de Jesucristo”.

Destaca, por su importancia para el presente y el futuro de la Iglesia, la Peregrinación Europea Jóvenes que se desarrolló del tres al siete de agosto: “Fueron días inolvidables por la honda alegría, a veces desbordante, por el clima sereno de oración compartida, de catequesis y celebraciones litúrgicas marcadas por el encuentro con el Señor”. Y añade que “durante estos dos años jubilares también muchas personas han acudido como visitantes y han regresado como peregrinos al haber sentido que su corazón había sido tocado por Dios. Y es que la vida se transforma cuando dejamos que Dios entre en ella”.

En la segunda parte de la carta pastoral, monseñor Barrio agradece al papa Francisco la prórroga del Año Santo: “Le agradecemos además que nos esté marcando este rumbo renovado en la Iglesia y en especial por esa mirada a los más frágiles, a los más pobres. Desde aquí le mostramos nuestra comunión afectuosa, que se hace oración por todas sus intenciones”.

En este contexto, el arzobispo recuerda también con gratitud el memorable discurso que con sentido profético pronunciaba san Juan Pablo II en la Catedral compostelana hace cuarenta años: “Llegó como maestro y como testigo, para confirmarnos en la fe y alentarnos en una nueva evangelización, tan necesaria entonces como lo es hoy para el mundo”.

Termina recordando el objetivo de este Año Santo expresado en su carta pastoral de convocatoria fue Sal de tu tierra. El Apóstol Santiago te espera. Poneos en camino. En este sentido invita a mirar con esperanza al futuro.