En ruta por los pueblos de la pequeña y la gran pantalla

Los pueblos españoles han servido de escenario para diversas películas de Hollywood, series internacionales y nacionales, porque la España vaciada, sus acantilados, edificios medievales y sus aldeas son excelentes localizaciones y se han convertido en destino para un turismo rural de película.

Los cinéfilos tienen en España un sin fin de lugares que han sido protagonistas de series y películas tan conocidas como Verano azul, El Pueblo, Juego de Tronos, Black Mirror, Doctor Who, Indiana Jones, El bueno, el feo y el malo o Cleopatra.

Del sofá al plató y sin necesidad de un croma, hacemos un recorrido por la escenografía de los pueblos de la pequeña y la gran pantalla que han servido de escaparate para el turismo rural.

El desierto de Tabernas en Almería, único en Europa, es uno de los destinos preferidos de los directores de cine western -oeste-, que mantiene algunos de los atrezzo de las películas más míticas, como por ejemplo el fuerte de la película El Cóndor o el “saloon” de La muerte tenía un precio.

Una zona del único desierto de Europa que está abierta al turismo y en la que los visitantes hacen un viaje no solo al otro lado del Atlántico sino también un viaje en el tiempo hasta el mítico “far west”.

Aúna los tres complejos turísticos del “viejo oeste” y villas y distintos edificios que han servido para rodar más de 300 películas desde los años 50 hasta la actualidad y gracias a lo cual se ha ganado el título de Tesoro de la Cultura Cinematográfica Europea.

Los pueblos españoles forman parte de la cultura televisiva de muchas series internacionales como Black Mirror, que grabó en el área de servicio del cruce de Tabernas (Almería), concretamente, en el restaurante Alfaro -Black Museum en la ficción-, el último capítulo de la afamada serie británica.

Pero no es la única localización española, también filmaron en uno de los pueblos más bonitos de España, en el casco antiguo de Tejeda (Gran Canaria).

Doctor Who, un médico del oeste en el desierto almeriense de Tabernas, el escenario elegido para está serie británica que lleva 42 años en emisión y que está catalogada como la serie de ciencia ficción en televisión más larga del mundo.

Una de las varias secuencias que Juego de Tronos grabó en territorio nacional se localiza en el pueblo de Campillo de Dueñas (Guadalajara), un municipio con 81 habitantes que convirtió en protagonista su castillo, el Castillo de Zafra.

En el ámbito de las producciones nacionales, El Pueblo, una de las series más recientes que intenta transmitir al espectador el problema de la despoblación rural y otros retos a los que se enfrentan sus protagonistas urbanitas, ha tomado como escenario Valdevilla, una aldea soriana que en la ficción es el pueblo de Peñafría.

Cuéntame cómo pasó es una de las series de televisión más emblemáticas del país, y Sagrillas, el pueblo donde transcurren las vacaciones de la familia Alcántara, es en realidad Arahuetes, en la provincia de Segovia.

Águila Roja, Isabel o Tierra de lobos tienen en común su set de rodaje, el pueblo de Pedraza, también en Segovia, y es que la villa medieval, su castillo, la calle Mayor, la Puerta de la Villa o su cárcel son los escenarios perfectos para reflejar esta época.

España es también escenario de películas de Oscar como El Laberinto del Fauno. El director, Guillermo del Toro, utilizó los pinares de San Rafael en Segovia y la sierra de Guadarrama para ejemplificar la guerra civil española, cuyo set de rodaje se conserva todavía.

Y para construir el Moscú de 1917 en Doctor Zhivago se utilizaron los campos invernales de Soria, Segovia y Salamanca.