“Pocos escuchan a su corazón en el día a día. El amor es tan sencillo que la vida lo complica”

Literatura
María Almodóvar
Afirma la escritora gallega Paula Cascallar: “Siento un serio desencanto hacia el amor, prefiero la amistad”. Foto: cedida

Paula, dices que el amor de los dos protagonistas sobrepasó los límites. Pero de eso trata el amor, ¿no?

Creo que el amor es más que un estado civil, está demasiado formalizado. Hoy en día, bajo mi percepción, presiento que el romanticismo está amenazado. Ya pocos se atreven a perder la cabeza y cometer locuras, es como si los sentimientos estuviesen penalizados. Muchas personas viven su historia acogidas a los tópicos, sin hacer caso de lo que sienten, muy conformes con lo que la vida depara. En mi novela hay clichés amorosos, aluden a lo indiscutible del estudiado fenómeno, pero los llevo a ese límite del que no hay vuelta atrás.

Pocas personas escuchan a su corazón en el día a día, me refiero a obedecer a la pasión en la toma de decisiones... Tanto los límites de la razón como el misterio son tabú en Occidente, vivimos en una sociedad enferma. El amor es tan sencillo que la vida lo complica.

Una canción de Imagine Dragons, ‘Walking the Wire’‟ (‘Caminando sobre el alambre’‟), habla del amor y de los obstáculos que la vida te pone por delante. Pero con amor y trabajo en equipo, afrontando lo que venga, todo sale adelante. ¿Esto tiene algo que ver con la historia de los protagonistas?

¡Gracias por la recomendación musical! Mis personajes son muy educados, pero irresponsables, y no asocian el porvenir a su momento inolvidable. Ellos no supieron gestionar lo que sentían, es como si el amor hubiera sido el gran descubrimiento de los dos y el resultado los desbordase. No supieron qué hacer con algo tan grande, se quedaron atrapados... Estos enamorados, en verdad, no se hacen gran ayuda, y sin embargo no pueden vivir el uno sin el otro. Están esclavizados y lo suyo no llega a ninguna parte, ¡nunca serán libres!

¿La enfermedad está presente en tu novela?

La cura de esta enfermedad es el reconocimiento. ¿En qué momento enloqueció? La locura es la otra cara de la moneda en esta historia, como un castigo que recae sobre su libertad... Es uno de los conflictos. Un guiño a la disidencia del pensamiento occidental, ya que la autoridad no les consintió. Muchos males del cuerpo provienen de las emociones, y en este caso la agresión del arrebato afectó a su salud. Todos hemos experimentado algún grado de locura, y quien lo niegue tiene un problema.

Querría saber si en tu libro el amor está contemplado incluso como una patología...

Espero que mis lectores lleguen a empatizar con esta historia: es una reivindicación del amor en todo ámbito, en toda acción.

Muy al contrario, en esta novela el amor es la única curación, y todo lo malo sucede al aparecer por la desconfianza. El amor ha concedido hermosos síntomas a la Medicina, y siempre que haya salud, estará ahí la amenaza, la vida, la enfermedad... En el transcurso de los tiempos el amor siempre fue una esperanza, ojalá no desaparezca, ojalá Occidente no erradique el romanticismo.

Dices que en la novela “la ternura atrapa y embelesa, mientras que la masculinidad suscita conflictos”. ¿Por qué?

En mi opinión, en todo el pensamiento hay una dualidad, es un diálogo que hace a la mente entrar en conflicto. Cuando encuentras a esa persona que te complementa, estalla el diálogo interminable del conocimiento.

Hay en el amor paz y violencia, que acarician los límites.

Ambos amantes comparten una ternura que arrasa...

¿Y por qué elegiste los nombres de Aloia y Xurés?

Quise darles una nomenclatura tanto monumental como natural, son bellos parajes gallegos, ¡son las cimas que ellos poseen! Con la fuerza de esas cumbres, ellos claman al cielo...

¿Cuál es el mensaje de tu novela? ¿Hay que aprovechar cada momento porque todo es efímero?

La brutalidad es inherente al ser humano y en la vida no hay salvación alguna, todos vamos a morir y la memoria engaña.

Hasta en lo más bello hay violencia, depredación. Hay quien se acoge a una historia de amor, pero el destino fatal está inscrito en el subconsciente: nadie escapa a la condición humana. En mi novela hay mucho cuestionamiento moral hacia las trabas que la sociedad impone a la libertad de pensamiento, una libertad innata que la educación coarta.

Paula, estamos ante tu primera novela. ¿Siempre quisiste ser escritora? ¿Qué nos puedes contar sobre ti?

Siempre destaqué en la escrita, el proceso que he vivido junto a la literatura es alentador. No sé si seré escritora toda la vida, últimamente lo soy. Soy muy versátil e inquieta, pero atraigo los problemas como la miel a las moscas... Tengo muchos proyectos en la mesilla, ¡estoy trabajando mucho! Por fin mi trabajo y el sacrificio comienzan a hacerse ver, estoy en la flor de la vida, en un buen momento. Segura de mí misma y sosegada. Espero salir adelante.

Tu primera novela lleva el sello Mundiediciones y ha sido la aportación de la editorial al Día del Libro. ¿Cómo te sientes?

Mundiario fue mi inauguración como escritora, en mi blog se recogen tiempos de mi vida y doctrinas, he contado con la confianza de esta empresa. Ha sido un constructivo ejercicio estos años, a veces un refugio, mi escaparate.

Estoy muy ilusionada, esperanzada, contenta... ¡Me va bien! Espero satisfacer a mis lectores, ¡esto es solo el comienzo!

¿Qué opinión tienes del amor? ¿Te ha decepcionado (como a todos algunas veces)?

Siento un serio desencanto hacia el amor, prefiero la amistad. Cada vez que se me presenta el momento crucial, siento una rabia que me separa. No he vivido aún la historia de mi vida, ha sido todo anecdótico. Odio, mi dios, el amor moderno, ¡no lo entiendo! No he nacido para este mundo... Pero sé lo que se siente, siempre escondo algún romance: no sé vivir sin estar enamorada, es lo que me da esperanza. Es como si el hombre de mi vida estuviese iluminando el final del túnel. Algún día, en el discurrir de mi vida, no necesitaré relatar nada... Mi presente será perfecto, sin fantasías, sin dudar. Para ello he de ser fuerte y seguir esperando, porque los tiempos cambian; por eso he de luchar por un mundo mejor, en él viviré la más grandiosa historia de amor.