Ábalos fija la conclusión de la alta velocidad gallega en el segundo semestre de 2021

En la puesta en servicio del tramo Zamora-Pedralba el ministro manifiesta que el corredor Atlántico de la Red Transeuropea de mercancías recibirá el mismo presupuesto que el Mediterráneo
Línea Alta Velocidad Galicia Madrid
Alberto Martínez
Viajeros bajando en la estación de San Cristóbal. Foto: Almara

Las obras del último tramo de la línea de alta velocidad entre Pedralba de la Pradería y Ourense estarán terminadas antes de que finalice este año, y su puesta en servicio será en el segundo semestre de 2021. Es lo que manifestó el ministro de Transportes, José Luis Ábalos, en el acto de apertura del tramo de Zamora a Pedralba, celebrado este lunes en la estación inacabada de Sanabria. Desde este martes, cuatro trenes en cada sentido unirán las ciudades gallegas y Madrid, con tiempos que ya mejoran al viaje por carretera. Y Ábalos espera que ello se traduzca en la mayor utilización del transporte más sostenible, el tren.

El integrante del Gobierno central también declaró que de los fondos del Plan Europeo de Recuperación Económica son una oportunidad que se debe aprovechar, y que de ellos se llevarán idéntico presupuesto el corredor Atlántico y el Mediterráneo de la Red Transeuropea de Transporte, ya que son prioritarios para el Ejecutivo que preside Pedro Sánchez, al vertebrar el territorio nacional. Y reconoció las justas reivindicaciones de Galicia, Asturias, y Castilla y León para el desarrollo económico de un noroeste peninsular envejecido en el aspecto demográfico.

En el acto participaron además la conselleira de Infraestruturas de la Xunta, Ethel Vázquez, y el de Fomento y Medio Ambiente de Castilla y León, Juan Carlos Suárez. Ambos felicitaron al ministro por su empeño para lograr la entrada en servicio de este nuevo tramo en medio de la dura crisis sanitaria por la covid-19. También reivindicaron el ramal noroeste del corredor Atlántico, recibiendo una respuesta satisfactoria que se debe ver en los Presupuestos Generales del Estado que este martes aprobará el Consejo de Ministros.

Al acto además asistieron la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, el secretario de Estado de Transportes, Pedro Saura, el secretario general de Infraestructuras, Sergio Vázquez Torrón, la presidenta de Adif, Isabel Pardo de Vera, el presidente de Renfe, Isaías Táboas, y los delegados del Gobierno de Castilla y León, José Javier Izquierdo, y de Galicia, Javier Losada.

INTENSA ACTIVIDAD. En su intervención, Ábalos señaló que la infraestructura, de 110,75 km y 898 millones de inversión que se pone en marcha, ha supuesto “un gran esfuerzo político, económico y técnico”, y destacó el impulso que se está dando al último tramo hasta Ourense, lo que “permite a ADIF trabajar con la previsión de tener todas las obras concluidas a finales de año y la puesta en servicio, siempre condicionada a la autorización de seguridad, la esperamos para el segundo semestre de 2021”.

Para lograrlo, expresó que se está trabajando “a un ritmo intenso” en el trazado de 119 km que resta para completar la infraestructura hasta Ourense. Y precisó que es “uno de los tramos más complejos de la alta velocidad ferroviaria no solo de España sino de Europa”, con el 80 % del recorrido en vías separadas y el 66 % en túnel, lo que “explica el montante de las inversiones que conlleva la línea gallega: 4.750 millones de euros, a los que habría que sumar la inversión en el Eje Atlántico”. Un gasto, por cierto, “ejecutado con una alta eficiencia en relación a otros países” y que fue posible, en gran medida, por la solidaridad europea, recordó Ábalos.

Y si bien la lucha contra la covid-19 es la prioridad para el Gobierno, según apuntó el ministro, éste opinó que “es importante no parar nada que se pueda continuar dentro del marco de las medidas sanitarias y así, prepararnos para el futuro”. “Y por eso, con esfuerzo y compromiso en este tiempo hemos podido completar este tramo, pese a las difíciles condiciones de los últimos ocho meses”, apostilló.

MERCANCÍAS. En cuanto al compromiso de su departamento ministerial con Galicia, Castilla y León y Asturias que forman parte del noroeste peninsular, la zona más afectada por el proceso de pérdida de población, afirmó que “el corredor Atlántico recibirá el mismo impulso inversor que el Mediterráneo en el Plan europeo de recuperación, dado que ambos son una prioridad para el Gobierno”. Y recordó que en los 28 meses que lleva en el cargo, la inversión real ejecutada del ministerio que dirige en las tres autonomías “suma 2.830 millones de euros, el 24,3 % del total, casi duplicando su peso demográfico (el 13 %)”.

IMPRESCINDIBLE. La línea de alta “velocidad es para la Xunta la prioridad número no en materia de infraestructuras para Galicia”, declaró en su turno de intervención Ethel Vázquez, quien señaló que la puesta en servicio del tramo es “un gran día para manifestar la satisfacción del pueblo gallego”, porque ahora Galicia está más cerca del resto del territorio nacional.

Asimismo trasladó al ministro la satisfacción del presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, quien no se desplazó al coincidir el acto con la Conferencia de Presidentes. Y consideró que es obligado reconocer el impulso de los diferentes ejecutivos en un proyecto “complejo y costoso”, citando al presidente José Luis Rodríguez Zapatero y a su ministro José Blanco, al presidente Mariano Rajoy junto a los ministros Ana Pastor y Íñigo de la Serna, y al presidente Pedro Sánchez, con el ministro José Luis Ábalos y la presidenta del Adif, Isabel Pardo de Vera.

Como “responsable de obras públicas en la Xunta e ingeniera de Caminos”, Vázquez reconoció la labor de todos los trabajadores “consciente de las grandes dificultades de este proyecto”, y del “esfuerzo titánico desde el punto de vista técnico, desde el diseño hasta su ejecución”.

Y aprovechó su turno para reivindicar el enorme potencial de las comunidades del noroeste que precisan que el Ministerio de Transportes apueste por el corredor Atlántico de mercancías.