La almeja de Costa da Morte sigue pagándose a precios de la Navidad

En Camariñas, principal productor, alcanzó los 42 euros el kilo en lonja el viernes y la media del año ronda los 34 // La escasez y su calidad son las claves // En el Anllóns creció un 70 % la producción de berberecho en 2022

Profesionales de la agrupación de mariscadores de la cofradía de Camariñas faenando en el banco marisquero de A Vasa / J. m. R.

Profesionales de la agrupación de mariscadores de la cofradía de Camariñas faenando en el banco marisquero de A Vasa / J. m. R. / JOSÉ M. RAMOS

El invierno está siendo duro, pero el sector marisquero de Costa da Morte, acostumbrado a tener que capear mil y un temporales, sigue resistiendo y bajando a la arena para sacar el máximo provecho de la alta calidad de sus productos. Así lo continúan haciendo las mariscadoras y mariscadores de Camariñas que, aunque escasos de recursos, están logrando subsistir gracias a la alta cotización de la almeja fina, su principal y única fuente de ingresos en los últimos meses debido a que sus bancos se han quedado sin berberecho y sin almeja japónica.

Berberecho del estuario del Anllóns / mariscadoras río anllóns

Berberecho del estuario del Anllóns / mariscadoras río anllóns / JOSÉ M. RAMOS

En lo que va de año cosecharon más de 1.580 kilos de almeja fina, que se cotizó en la lonja local a un precio medio de 33,71 €/k, según los registros de Pesca de Galicia. El pasado año 2022 esta variedad fue también el principal sustento de los mariscadores camariñanos, que comercializaron 7.258 kilogramos que supusieron unos ingresos de casi 200.000 euros, aunque la el precio medio situó en torno a los 28 €/k.

La presidenta de la agrupación de mariscadores de Camariñas, Jacqueline Lista, indicó que en las últimas semanas la cotización media se situó en torno a 36 euros por kilo, llegando a alcanzar el pasado viernes los 42 €/k en la rula local. Unos precios que están al nivel de los alcanzados en temporadas como la Navidad, “polo que tentamos de traballar todas as mareas”, afirmó.

El longueirón y la navaja se reafirman como principal recurso marisquero en el área de la ría de Corcubión

Entre las claves de estas buenas cotizaciones hay que destacar “a grande calidade da nosa ameixa que, para nós, é a mellor”, destacó Jacqueline, quien resalta también otro factor: la escasez de producto en el mercado y también en los bancos marisqueros de la zona.

Actualmente, en la costa de Camariñas trabajan una media de unas treinta mariscadoras y mariscadores que, en las últimas semanas, centraron su labor extractiva en el banco de A Vasa, por ser el menos afectado por la mortandad del marisco a causa de las riadas de este invierno y a un exceso de agua dulce en la desembocadura del río do Porto.

El objetivo de la agrupación, ahora que se encuentra a las puertas de la primavera, es recuperar todos los bancos y especies, dado que actualmente carecen de existencias de almeja japónica y también de berberecho, las cuales en los últimos años han sido un complemento de gran importancia para las economías de los maricadores locales.

“Temos moito que traballar”, indicó la presidenta del colectivo, quien, a pesar de todo, ve “moi animado ao sector e con gañas de traballar, pois os bancos marisqueiros son como as hortas, hai que sementar e coidar o produto para logo poder recoller”.

Ese es uno de los objetivos de la agrupación para los próximos meses y, para ello, echarán mano de las ayudas de la Xunta de Galicia y de la cría que tienen en el banco marisquero de Area da Vila para repoblar con berberecho y almeja japónica sus tres principales playas: A Paxariña, O Canal y A Vasa.

Destacar que todo el marisco cosechado en el litoral de Camariñas se subasta en la lonja local. La puja se puede seguir tanto de forma presencial como online, y en ella suelen participar tanto compradores de la zona como de otros puntos de Galicia, especialmente de la Rías Baixas.

En los bancos marisqueros de Camariñas sembrarán esta primavera cría de japónica y berberecho

ANLLÓNS.

Un poco más al norte, en la desembocadura del río Anllóns, entre Ponteceso y Cabana de Bergantiños, el rey es el berberecho. El pasado año la producción de este preciado bivalvo se incrementó más del 70 % respecto a 2021. Las mariscadoras de la agrupación Río Anllóns comercializaron, según datos de Pesca de Galicia, más de 82.200 quilos de berberecho que generaron una facturación total de casi 600.000 euros. El precio medio se situó en 7,25 €/k.

Cifras que contrastan con las 2021, año pandémico, cuando las capturas se redujeron a 27.000 kilos y los ingresos del sector apenas superaron los 216.800 euros. El precio medio fue ligeramente superior: 8 €/k.

En lo que va de año, los registros apuntan al optimismo, porque Pesca de Galicia contabilizó ya unas ventas de más de 28.000 kilos y una facturación que supera los 263.000 euros. A ello hay que sumar además un repunte de la cotización media del berberecho del Anllóns, situándose en 9,27 euros por kilo.

En la zona sur, el longueirón y la navaja se reafirman como principales recursos marisqueros de los bancos de la ría de Corcubión.

El pasado año, los mariscadores de Corcubión cosecharon cerca de 14.000 kilos de navajas, con los que obtuvieron unos ingresos por encima de los 166.000 euros, según las estadísticas de Pesca de Galicia. El precio medio de cotización en lonja de esta especie rondó los 12 €/kg, si bien los mejores ejemplares llegaron a cotizarse a más de 26 €/Kg. Por su parte, en la rula de Fisterra se subastaron unos 11.000 kilos en 2022, superando la facturación los 127.000 euros, y la cotización media se acercó también a los 12 euros por kilo.

LONGUEIRÓN.

El longueirón, otra especie muy apreciada, se cotizó en Fisterra a una media de 10 €/kg. El pasado año se subastaron en la lonja local más de 17.500 kilogramos, que supusieron para el sector unos ingresos de casi 170.000 euros, siendo la rula que acaparó la principal producción de este bivalvo al que, desde hace años, se dedica una fiesta de exaltación y degustación en la capital fisterrana.

Otras de las lonjas que comercializaron longueirón el pasado año fueron las de Laxe, que movilizó más de 6.100 kilos, y generaron una facturación de 46.000 euros; Corcubión, donde se subastaron más de 4.600 kilogramos, con unos ingresos que rondaron los 40.000 euros; y Camariñas, a cuya rula llegaron más de 2.100 kilos, ascendiendo la facturación a más de 17.200 euros. Los precios medios en estos puertos oscilaron entre 7,5 y 8,5 euros por kilo, según los registros de Pesca de Galicia.