Las playas fluviales y las piscinas compostelanas se llenan el fin de semana para burlar la ola de calor

No hizo falta recorrer muchos kilómetros y trasladarse a la costa desde el interior para combatir las altas temperaturas que se registraron en la comarca compostelana este fin de semana, en el que playas fluviales y piscinas públicas llegaron a colgar el cartel de lleno ante la afluencia de numerosos usuarios que se quisieron dar un baño para combatir la primera ola de calor del verano y una vez que se controló la calidad de las aguas.

Cinco playas fluviales cerca de Santiago para darse un chapuzón este verano

A excepción de la playa fluvial de Furelos, en Melide, donde la administración municipal deberá volver, un verano más, a desaconsejar el baño porque la calidad de las aguas en ese tramo del río no es aceptable, en las otras playas fluviales del área compostelana la clasificación que ha realizado Sanidade de las aguas es buena. En el área recreativa de Chaián, situada al paso del río Tambre por Trazo, la clasificación sanitaria es buena; es excelente en la playa fluvial de Tapia, en Ames; es buena en A Tarroeira, en O Pino; y suficiente en la playa fluvial de Seira, en Rois. También próximas a Santiago están las playas fluviales de O Refuxio, en Oroso, y Ribadiso, en Arzúa, muy visitadas el fin de semana.

Todas estas playas fluviales y las piscinas al aire libre con las que cuentan dichos ayuntamientos y el resto de los del Área de Santiago han marcado llenos durante el fin de semana, en el que, aunque muchos compostelanos optaron por ir a las playas de la costa, ya son muchos también los que eligen esta alternativa de áreas fluviales, con arboledas y sombras en las que refugiarse y con menos retenciones de tráfico cuando toca el regreso hacia el hogar.

Una de estas áreas que cada día gana más adeptos, y que fue muy frecuentada en este primer fin de semana del verano, fue la playa fluvial de Tapía, en el municipio de Ames, que está a apenas quince minutos del centro de la ciudad de Santiago de Compostela. Además de las frescas aguas del Tambre para olvidarse del calor, el área dispone de todos los servicios y comodidades, y muchas familias aprovechan para llevar su comida y pasar el día allí.

ESCASO AFORO

La ola de calor también hace florecer año a año las carencias y los escasos aforos que ofertan algunos concellos en lo que respecta a sus zonas de baño. En este aspecto también destaca el Ayuntamiento de Ames, que en su núcleo más habitado, O Milladoiro, tan solo cuenta con una piscina al aire libre, con dos vasos: uno infantil y otro para jóvenes y adultos. Una escasa oferta para una población de cerca de 15.000 habitantes, con gran cantidad de jóvenes y niños que son los que más utilizan este tipo de instalaciones.

Por otra parte, los días de mucha afluencia los socorristas tienen que impedir el paso cuando consideran que el aforo de la piscina ya está cubierto, lo que genera malestar.