Alimentación

Tres de cada cinco clientes han rebajado el gasto en productos frescos por la inflación

Los consumidores de Cataluña han detectado en 2022 el aumento del precio de estos productos y, por este motivo, algo más del 60% dice haber recortado la compra de estos artículos

Una nave de productos frescos en Mercabarna, en una imagen de archivo.

Una nave de productos frescos en Mercabarna, en una imagen de archivo. / FERRAN NADEU

Paula Clemente

Son uno de los grandes protagonistas de la cesta de la compra, y, como tal, uno de los grandes damnificados por el encarecimiento generalizado de los precios: prácticamente todos los consumidores catalanes han detectado en 2022 el aumento de precio de los productos frescos en el supermercado y algo más del 60% dice haber recortado la compra de estos artículos por ello. Así lo recoge la quinta edición del Observatorio de los frescos de Aldi, un estudio que concluye, también, que en Cataluña se gasta mucho más en frescos que en España en su conjunto.

Hablan de productos como el pan, la charcutería, los huevos, la carne, el pescado y marisco y las frutas y verduras. De acuerdo con este análisis, el presupuesto anual destinado a la compra de este tipo de productos fue de 2.089 euros en Catalunya, casi 200 euros más que los 1.901 que refleja el estudio a nivel estatal. Esta cifra es, por cierto, prácticamente la misma que la del año anterior, lo que significa que la caída en el consumo de productos frescos es general, porque si se hubiera comprado lo mismo, el gasto hubiera sido mucho mayor, dado el aumento de precios.

“La relación calidad-precio (74,5%) y la calidad (55,1%) siguen siendo los factores que más se tienen en cuenta en la compra de productos frescos en la comunidad catalana”, apunta Aldi, que realiza este estudio a partir de una encuesta a una 3.200 personas y con la ayuda de Kantar y Séntisis. Pese a eso, “los consumidores no han sido ajenos al contexto inflacionista que vivimos, y el precio se ha consolidado como un aspecto clave para cerca de la mitad de familias (49%) a la hora de hacer la compra de frescos en el supermercado”, explican.

No es de extrañar, entonces, que tres de cada cinco clientes en Catalunya aseguren haber comprado menos producto fresco este año. De hecho, el informe revela que la demanda ha caído en España un 8% en relación a 2021.

Fruta, verdura y carne

Aún así, los datos recabados por Aldi evidencian que los productos frescos siguen llevándose una parte nada menor del presupuesto anual en alimentación de los consumidores: según el observatorio, este tipo de productos copan el 43,2% del gasto. Lideran el ránking la fruta y la verdura, con el 37,4% del desembolso; luego, la carne fresca (25%); la charcutería (15,3%); y el pescado y marisco (13%).

De hecho, las estadísticas internas de esta cadena reflejan que en este supermercado en concreto se vendió un 8,5% más de productos frescos en 2022 que en 2021. “En un contexto marcado por la subida de precios, el modelo de descuento de Aldi, que tiene integrada la experiencia y el saber hacer necesarios para asegurar un ajuste continuo de los procesos para lograr ahorros de precio para el consumidor, adquiere especial relevancia”, argumentan desde la cadena. “El esfuerzo por contener los precios y seguir facilitando vías de ahorro a los consumidores, especialmente en este tipo de productos básicos que son los que más incidencia tienen en la cesta de la compra de los españoles, ha sido crucial”, concluyen.