La vaca de Ale-Hop dispara sus ventas un 31% y factura 224 millones de euros

La vaca de Ale-Hop vuelve a batir su propio récord. La cadena de tiendas de productos originales y de regalo cerró el año pasado con una facturación de 224 millones de euros, tras crecer un 31% con respecto al ejercicio anterior, según la información facilitada por la propia compañía.

Un incremento de la cifra de negocio que, además, fue acompañada de un beneficio más que significativo, ya que la firma anotó unas ganancias netas consolidadas de 41 millones de euros. O, lo que es lo mismo, la compañía de la familia Grimalt consiguió transformar en beneficio prácticamente uno de cada cinco euros que ingresó en caja. Una rentabilidad que le permitió continuar con su estrategia de cero endeudamiento, a pesar de las fuertes inversiones realizadas, que superaron los 25 millones de euros.

Al respecto, desde la propia firma atribuyen este buen comportamiento del negocio a la expansión de la red de establecimientos y a la recuperación de la economía y, en especial, del turismo, ya que, a pesar de la diversificación geográfica que emprendió hace unos años, buena parte de sus puntos de venta todavía se concentran en la costa y otros enclaves que viven de la llegada de visitantes.

Sobre el primero de estos temas, Ale-Hop mantiene una importante política de aperturas, que le llevó durante el pasado ejercicio a inaugurar 31 nuevos establecimientos en España y Portugal –que considera sus dos mercados naturales-, pero también en Croacia e Italia, los dos países que ha escogido para su expansión internacional. En total, la cadena ya supera los 300 puntos de venta.

Un ritmo de aperturas que sigue este año, en el que ya ha abierto nuevas tiendas en Rimini (Italia), Madrid, Rijeka (Croacia), Cáceres y Almuñécar, y ha cerrado diez nuevos contratos para abrir otros tantos establecimientos más.

En total la firma invirtió 25 millones de euros en la apertura y renovación de la imagen de sus puntos de venta, pero también en la digitalización de procesos, diversos proyectos de I+D+i y en sus centros de distribución. Así, uno de los hitos que prevé para este años 2024 es la finalización del nuevo centro logístico de la compañía en la localidad valenciana de Oliva –el cuarto de la firma-, que se levanta sobre una parcela de 30.000 metros cuadrados y cuyo almacén tendrá una capacidad de 31.000 palets.

Para el año en curso, la estrategia de crecimiento de la empresa se enfoca en continuar su expansión nacional y consolidar su presencia en los mercados internacionales donde ya opera, según explican desde la firma. No obstante, continúan explorando "nuevas oportunidades" de expansión en el exterior, eso sí, desde un criterio de "crecimiento prudente y sostenido", según afirman los responsables de la cadena, que recalcan que la firma realizó el pasado ejercicio una contribución tributaria de 61 millones de euros gracias a su actividad.

Fundada en 1991 por Vicent Grimalt en Gata de Gorgos, Ale-Hop continúa siendo una empresa de capital familiar, que cuenta en la actualidad con más de 2.000 empleados. La compañía mantiene una política de autofinanciación, que le ha llevado a realizar toda su expansión sin recurrir a créditos bancarios, únicamente con los recursos que genera.

Su surtido está formado por artículos de diseño propio destinados a la compra de impulso y también para regalos. Uno de los factores con los que juega es con la sorpresa de los clientes que visitan los establecimientos ante los artículos llamativos que suele mostrar en sus escaparates. Es conocida por tener una figura de una vaca de gran tamaño en cada una de sus tiendas.