Viaje oficial del jefe del Ejecutivo

Sánchez denuncia en China la "brutal e ilegal agresión" de Putin a Ucrania

El presidente del Gobierno defiende en un encuentro con mandatarios internacionales y empresas que España es “uno de los mejores lugares de Europa para hacer negocios”

Pedro Sánchez, al primer ministro chino: “Queremos avanzar a una colaboración con la UE más equilibrada”.

Agencia ATLAS / Foto: EFE

Juan Ruiz Sierra

Pedro Sánchez ha comenzado este jueves su 

 con una denuncia de la invasión de Rusia a Ucrania. “La humanidad se enfrenta a retos globales de una escala sin precedentes: la emergencia climática, la pandemia y la brutal e ilegal agresión de Rusia contra Ucraniaque está provocando una enorme crisis humanitaria, inseguridad alimentaria, inflación y deuda en un creciente número de países vulnerables”, ha señalado el presidente español durante la inauguración del Foro de Boao, un encuentro asiático entre dirigentes políticos y empresas similar al que se celebra cada año en Davos (Suiza). 

El jefe del Ejecutivo suele referirse a la invasión rusa en estos términos, pero sus palabras tienen en China una relevancia especial. El gigante asiático es uno de los países que se sitúan más cerca de Vladimir Putina quien Sánchez ha evitado citar en su discurso. Su presidente, Xi Jinping, con quien el líder del PSOE se reunirá el viernes en Pekín, acaba de volver de Moscú, donde se entrevistó con su homólogo ruso, y ha lanzado recientemente su propia propuesta para alcanzar la paz en Ucrania. 

El Gobierno de Volodímir Zelenski rechaza la iniciativa, porque evita condenar la presencia de tropas rusas en el país invadido y no se detiene en la devolución de territorios. Pero en la Moncloa, pese a su alineamiento con Ucrania, valoran el enfoque chino. Sobre todo, porque rechaza el uso de armas nucleares y defiende el respeto a la soberanía de los estados. 

La vertiente económica

El viaje de Sánchez tiene una enorme dimensión política internacional. El presidente español, explican fuentes de la Moncloa, busca palpar la voluntad de China para intentar acabar con el conflicto en Ucrania y también, si es posible, conocer de primera mano qué le dijo Putin a Xi la semana pasada en Moscú. Pero la visita tiene también su vertiente económica. China es el principal proveedor de España y el líder socialista quiere aprovechar también este viaje para reactivar el turismo proveniente del gigante asiático, frenado por el coronavirus. Cada chino gasta 2.500 euros de media por viaje, según la Asociación de Turismo España-China. Ahora que China ha dejado atrás su covid cero y ha vuelto a autorizar los desplazamientos en grupo a Europa (la medida se empezó a aplicar el pasado 15 de marzo), Sánchez quiere transmitir el mensaje de que se facilitarán los visados. Así lo hará el viernes, durante una reunión en Pekín con los principales turoperadores del país asiático. 

El presidente español también se ha centrado en su discurso, pronunciado en inglés, en las relaciones comerciales del país asiático con España y la UE, cuya presidencia asumirá España durante el segundo semestre de este año. “China y Europa deben competir en algunas áreas y cooperar en otras. Y, permítanme ser franco, vamos a continuar defendiendo los valores, principios y puntos de vista europeos desde una perspectiva independiente. No vamos a renunciar a ellos”, ha dejado claro el presidente español. 

En este sentido, el líder socialista ha resaltado tres aspectos en los que la “colaboración” entre China y la UE debe ser "inmensa": fortalecer el multilateralismo, acelerar la lucha contra el cambio climático y cumplir con los Objetivos de Desarrollo Sostenible y reformar la arquitectura financiera internacional. 

“España es hoy uno de los mejores lugares de Europa para invertir y hacer negocios -ha concluido Sánchez-. Ofrecemos una posición geopolítica ideal, al estar ubicados en la intersección entre tres continentes, un sector privado vibrante y sólido, una infraestructura digital y física de talla mundial, mano de obra altamente capacitada, energía limpia asequible y la estabilidad institucional y la seguridad jurídica que las inversiones necesitan para prosperar”.