El adelanto electoral de Sánchez sitúa las primarias del PSdeG en el mes de septiembre

La decisión del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de adelantar al próximo 23 de julio las elecciones generales, en respuesta a los malos resultados de los comicios municipales del 28-M, no trastocará en exceso el calendario de los socialistas gallegos para preparar la contienda electoral por la Xunta. En las últimas semanas se había apuntado la posibilidad de que el proceso de primarias del que saldrá el candidato del PSdeG para las autonómicas del año que viene se iniciaría después de las elecciones locales, si bien el secretario xeral de la formación, Valentín González Formoso, señaló en su día el mes de septiembre como la fecha más probable para la puesta en marcha de ese proceso interno. Ahora, tras la convocatoria de las generales para el mes de julio, parecen despejarse todas las dudas. Fuentes socialistas consultadas por este periódico señalan que no sería “lo más adecuado” que el debate de las primarias se celebrase en el mes de julio, coincidiendo con la campaña electoral de las generales, en las que los socialistas gallegos también deberán implicarse.

Una vez despejada la duda de si el adelanto de las generales motivaría también la decisión del presidente de la Xunta y del PPdeG, Alfonso Rueda, de convocar anticipadamente las autonómicas, para los socialistas gallegos no supondría un problema aplazar hasta el final del verano unas primarias a las que, según González Formoso, se le dará el tiempo necesario para garantizar que cualquier militante pueda reunir los avales necesarios si decide presentarse.

En todo caso, lo que toca ahora es analizar el resultado de unas municipales en las que el PSdeG sigue siendo segunda fuerza en los ayuntamientos, pero en las que se dejó 76.000 votos y 171 concejales, al pasar del 32,8% de los votos que obtuvo en 2019 al 29,1%.

Ese análisis tendrá lugar este jueves por la tarde, durante una reunión de la Ejecutiva en la que, además de analizar la pérdida de apoyos el 28-M, el PSdeG debe evaluar la situación en los ayuntamientos donde no obtuvo mayoría absoluta, pero tiene opciones de gobernar gracias a pactos que, en la mayor parte de los casos, se plasmarán con el BNG.

En su comparecencia del pasado lunes, el portavoz parlamentario de la formación, Luis Álvarez, reconocía que los resultados del 28-M “no son buenos”, pero rechazaba que el partido tuviese que “flagelarse en exceso”, tras lograr mantener las diputaciones coruñesa y lucense y los gobiernos de Vigo, A Coruña y Lugo, entre las 90 alcaldías a las que prevén llegar, a pesar de perder las de Ferrol y Santiago, junto con la Diputación de Pontevedra, las dos últimas las mayores decepciones de la formación en la noche electoral.

Tras la constitución de las corporaciones locales, el próximo 17 de junio, será el turno de las diputaciones provinciales, que se pondrán en marcha en torno al 1 de julio. Se da por hecho que González Formoso seguirá al frente de la de A Coruña. El debate puede surgir en la de Lugo, después de que trascendiese que hay sectores del partido que serían partidarios de que José Tomé fuese sustituído en la presidencia de la institución. Fuentes del PSdeG indicaban a este periódico que se trata de un debate “prematuro e interesado”, puesto que Tomé ha manifestado su voluntad de continuar en el cargo y no hay razones que hagan pensar en lo contrario. No obstante, en estos momentos, uno de los nombres que más suena para el puesto es el de Mayra García, alcaldesa de Trabada que acaba de revalidar su mayoría absoluta y próxima a José Ramón Gómez Besteiro.

Lo que no suscita dudas es que el actual delegado del Gobierno será uno de los contendientes en ese proceso de primarias que debe afrontar el PSdeG. De momento, Formoso sigue sin descartarse oficialmente y hay quien apunta a Gonzalo Caballero, exsecretario general, como un tercer posible aspirante.